La Universidad de La Laguna (ULL) quiere que "una institución independiente" se encargue de la contratación de investigadores de prestigio internacional "con el objetivo de mejorar los resultados de investigación y captación de fondos competitivos de las universidades canarias".

Esta propuesta está recogida en el plan estratégico de la ULL, cuyo borrador fue presentado ayer en un claustro convocado específicamente para ello, y pasa por una alianza con la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), además de por el apoyo del Gobierno canario.

El documento -que recibió críticas porque su contenido se plasma en 60 páginas y muchos claustrales consideraron insuficiente su desarrollo- hace especial hincapié en la urgencia que tiene la ULL de captar talento, dado el envejecimiento de su plantilla: la edad media del Personal Docente e Investigador (PDI) es de 53 años y la del Personal de Administración y Servicios (PAS), de 50.

Para reponer todo ese personal que se jubilará en los próximos diez años, el documento propone un organismo -similar a los que existen en comunidades como País Vasco y Cataluña- que haga una evaluación basada en criterios de mérito y capacidad garantizada por comisiones de selección externas, además de evaluar el rendimiento de los profesores y profesoras que estén contratados.

Además, el documento apunta al desarrollo de todo un conjunto de medidas que garanticen que la captación de personal (PDI y PAS) para los próximos años responda a criterios exigentes de mérito y capacidad.

A través de esta batería de iniciativas se debe "potenciar la captación de personal con experiencia internacional y discriminar positivamente el uso del inglés en el ámbito académico para favorecer la internacionalización docente e investigadora de la Universidad".

El plan ha sido dirigido por Daniel Alonso, investigador y profesor de Ciencias, que ha contado con apoyo de una empresa externa, Lead to change, que ha cobrado 18.000 euros. Alonso explicó que el documento es un punto de partida y que el objetivo es que toda la comunidad universitaria colabore.

Por su parte, la gerente de la institución académica, Lidia Pereira, argumentó al término del claustro que la decisión de contar con asesoramiento independiente busca que la hoja de ruta se haga con una mirada que no se ciña solo a la Universidad.

El texto se abre ahora a exposición pública para que la comunidad universitaria priorice qué líneas deben seguirse. Una vez se decidan los proyectos, se le asignará una ficha financiera, una planificación y tiempos de ejecución, avanzó el director. "Tenemos que colocar el foco donde debe estar, poniendo al alumnado como principal protagonista, cuidando las interacciones que se producen con este público, como son la vida universitaria, la internacionalización, la formación y su interacción con la sociedad".

A pesar de la intencionalidad del texto, ningún grupo del PAS estuvo de acuerdo con el contenido ni la forma. La mayoría de las quejas se centró en el escaso desarrollo de cada una de las medidas y la falta de datos que avalen que las líneas de actuaciones se sustentan en algo más que percepciones. También se recordó que el plan anterior, aprobado en 2008, aún tiene multitud de puntos pendientes de ejecución.

El PDI tampoco encontró muchos motivos para la alegría. Renovación Convergente (RC) describió el texto como "un preámbulo general que arroja muchas dudas, ya que se desconoce por qué se escogen unas líneas y no otras", y criticó que no cuente con un "análisis DAFO", que señale las debilidades y fortalezas de la ULL.

Por último, el alumnado, especialmente AMEC, criticó la presencia de empresas entre "los agradecimientos" y que, en cambio, apenas se haya consultado al alumnado, el sector mayoritario de la comunidad universitaria.

Bajo rendimiento del alumnado

El bajo rendimiento y el alto nivel de abandono del alumnado de las universidades públicas del Archipiélago también aparecen en el documento, que pone el foco en la conveniencia de impulsar medidas docentes para mejorar estos indicadores.

"La Laguna Lab"

El documento plantea la articulación de un punto de encuentro que fomente una comunicación fluida entre el

colectivo de estudiantes y los diversos agentes sociales y económicos. Y le pone nombre: "La Laguna Lab", un centro de transferencia de conocimiento, de valorización de los resultados de investigación y que fomente el desarrollo de un programa de innovación con las empresas, "pensado para generar lógicas de transferencia que tengan su punto de partida en las necesidades y retos de las empresas canarias".