La Audiencia de Las Palmas permitirá al procesado en el "caso Eólico" Alfredo Briganty asistir al juicio en libertad y asistido legalmente, por el momento, por un compañero de sus despacho jurídico, mientras consigue otro abogado, según ha anunciado él mismo.

Briganty ha comparecido esta mañana ante la Audiencia de Las Palmas conducido por la Policía, tras haber sido detenido ayer en Marbella (Málaga) por no haberse presentado la víspera a la sesión inicial del juicio.

El magistrado que va a presidir el Jurado, Pedro Herrera, ha consultado hoy a las acusaciones y defensas si consideraban que existe suficiente garantía de que este procesado asistirá al juicio sin obstaculizar su celebración o, si por el contrario, creían que conviene mantenerlo bajo custodia.

Al término de esa sesión, celebrada a puerta cerrada, Briganty ha salido en libertad de la sala y ha comunicado a los periodistas lo que ha resuelto el magistrado: dejarlo libre, al no apreciar riesgo de que se fugue o de que obstaculice de nuevo el desarrollo del juicio.

Alfredo Briganty se enfrenta a una solicitud de condena de año y medio de prisión por un delito de cohecho, acusado de haber sobornado hace 14 años al director general de Industria del Gobierno de Canarias, el también procesado Celso Perdomo, para obtener prebendas en el concurso de parques eólicos.

La pena a la que se expone permitiría, en teoría, que el juicio se celebrase sin él en la sala, en condición de rebeldía. Sin embargo, hasta esta mañana Briganty se representaba a sí mismo como letrado, lo que impedía enjuiciar el caso en su ausencia, porque no habría nadie que defendiera sus intereses y derechos.

El procesado ha alegado que no fue él quien renunció a su anterior letrado, sino al revés -fue su abogado decidió no seguir defendiéndolo-, y también ha remarcado que avisó con tiempo al tribunal de su situación.

Además, ha anunciado que impugnará la multa de 18.000 euros que el magistrado Herrera ha propuesto imponerle en su condición de letrado por no haber asistido a la sesión del miércoles, al entender que no está justificada.