Canarias sufrió 24 casos diarios de violencia machista en el primer trimestre este año, cuando un total de 2.160 mujeres fueron víctimas de violencia de género, lo que supone un 1,4 por ciento más que en el mismo período de 2017.

Así se desprende de los datos dados a conocer hoy por el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Canarias en un comunicado.

Por provincias, en Las Palmas se contabilizaron durante el primer trimestre un total de 1.174 víctimas (987 españolas y 187 extranjeras), las cuales formularon un total de 1.125 denuncias.

En 116 casos las afectadas se acogieron a la dispensa a no declarar contra su supuesto agresor.

La ratio en Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura durante el primer trimestre fue de 10,1 mujeres víctimas de violencia machista por cada 10.000 habitantes, y 20,2 cada 10.000 mujeres, entre las más altas de España.

En lo que se refiere a la provincia de Santa Cruz de Tenerife, se computaron 986 mujeres víctimas de violencia machista, (759 españolas y 227 extranjeras), que formularon 976 denuncias.

De ellas, 117 se negaron a declarar contra sus parejas.

La ratio provincial fue de 9,6 féminas víctimas por cada 10.000 habitantes y de 18,9 por cada 10.000 mujeres.

Durante el primer trimestre de 2018, los juzgados isleños incoaron un total de 482 procesos de órdenes de protección y medidas cautelares (94 menos que en el mismo periodo del año anterior), adoptaron 305 (42 menos que en 2017), no admitieron siete (3 menos que en el primer trimestre de 2017) y denegaron 170 (49 menos que en 2017).

Los juzgados de menores de las islas registraron en el período analizado siete procedimientos por violencia sobre la mujer contra jóvenes de menos de 18 años, y a finales de marzo quedaban 15 pendientes de resolución.

Entre enero y marzo de este año, fueron juzgados por violencia machista dos jóvenes de entre 16 y 17 años en Las Palmas y uno en Santa Cruz de Tenerife.

Los tres casos acabaron con imposición de medidas, lo que en la jurisdicción de adultos equivaldría a condenas.