La consejera de Educación, Soledad Monzón, cree que las dudas sobre la entrada de videojuegos deportivos a las aulas se disiparán o, por lo menos, se atenuarán, una vez sus críticos entiendan que la puesta en marcha de una liga de eSports en 20 centros educativos el próximo curso sirve para educar en su uso responsable.

Soledad Monzón presentó ayer el proyecto educativo piloto para fomentar el uso responsable de los videojuegos entre los alumnos, que se basa en una actividad extraescolar que se ofrece dos veces a la semana y durará diez semanas, del 11 de octubre al 15 de diciembre.

La actividad sobre videojuegos deportivos, que se ofertará en centros de Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional de La Graciosa, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife, La Palma y La Gomera, contempla que un día de la semana los 20 alumnos repartidos en equipos mixtos que participen por centro dediquen una hora a entrenamientos, otra hora a talleres educativos y otra a actividad física.

La Asociación de Pediatría de Atención Primaria de Canarias (APAPCanarias) ha considerado inapropiado el apoyo del Gobierno a los videojuegos deportivos y partidos como el PP, Podemos y Nueva Canarias han criticado esta iniciativa. Sin embargo, Monzón cree que las críticas que se han vertido tienen que ver con el desconocimiento. "No se trata de una liga escolar pura y dura", sino que detrás de ella hay un proyecto educativo.

En su opinión, demonizar la liga "es eludir la realidad".

Según la Consejería de Educación, en Canarias, el 76% de niños entre 6 y 10 años juegan a videojuegos, el 78% entre 11 y 14 años y 65% entre 15 y 24 años.