El Hospital de Nuestra Señora de La Candelaria (HUNSC) reforzará las medidas de seguridad tras el incendio ocurrido la noche del lunes en el área de Urgencias, en concreto en la zona pediátrica, donde se encontraban 160 pacientes de distintas edades, de los que 47 tuvieron que ser reubicados en otros centros. De los enfermos, dos eran extranjeros residentes en Canarias que ya han sido dados de alta.

El director del Servicio Canario de Salud (SCS), Conrado Domínguez, relató ayer, en una rueda de prensa convocada para explicar lo sucedido, que poco antes de las nueve de la noche, cuando se detectó el fuego -a priori se piensa que fue intencionado porque una mujer se inculpó la misma noche-, se puso en marcha el protocolo de evacuación y autoprotección del centro y se avisó al 112, que se encargó de la coordinación de los distintos cuerpos de seguridad y emergencias.

"Se actuó correctamente" -dijo-, pero "las medidas de seguridad se van a revisar y a reforzar para que así estemos más seguros". Estas situaciones, "aunque estén planificadas, siempre generan angustia", explicó.

Lo cierto es que a la buena noticia de que el incidente se saldó sin víctimas mortales ni heridos graves, se sumaba en la tarde de ayer la reapertura de una parte del servicio de Urgencias, en un plazo de menos de 24 horas desde que se produjo el incendio.

A propósito, la Consejería de Sanidad señalaba a través de una nota que, tras proceder a la inspección y evaluación de este servicio por parte de los técnicos, "se ha habilitado la zona de urgencias no afectada por el fuego, de manera que desde este momento se encuentra operativa para atender los casos de carácter urgente, tanto adultos como pediátricos".

En este sentido, tambien se ha procedido a desmontar el hospital de campaña habilitado temporalmente por Cruz Roja frente a las instalaciones de dicho servicio de Urgencias.

Con la restitución de este servicico, Urgencias ofrecerá a los usuarios área de triaje, para valoración y distribución de pacientes según la gravedad y patología, además de área de Medicina Interna, zona de reanimación de urgencias, área de circulantes, así como también además de zonas de observación, urgencias traumatológicas y pediátricas, lo que supone un total de 43 camas.

El centro hospitalario continúa trabajando con la mayor celeridad posible para habilitar el resto de espacios próximamente y recuperar al cien por cien la normalidad, y agradece a todos los profesionales implicados su labor por hacer posible la reactivación de dicho servicio, así como la comprensión por parte de los usuarios,

Según los datos facilitados por el responsable sanitario durante la comparecencia , el hospital mantuvo ayer su actividad con normalidad, si bien una de las frases que más repetían los profesionales que estaban en el hospital era "¡qué susto!".

La Consejería de Sanidad del Gobierno autonómico no contaba ayer con una estimación económica de los daños causados por el fuego. Domínguez precisó que "lo más importante" ahora es acometer esa evaluación de daños y declarar la obra de emergencia, para poder recuperar cuanto antes la parte afectada y la no afectada, que están inhabilitadas ahora mismo.

"Una vez extinguido el incendio, se ha aireado toda la zona y se está haciendo un análisis de la situación para proceder a realizar una declaración de emergencia de las obras que hay que acometer", explicó.

Además, los técnicos están evaluando si el fuego puede haber afectado a otras partes del hospital no visibles a simple vista.

Además, Domínguez anunció que se van a "reforzar" todas las urgencias extrahospitalarias y pidió a los ciudadanos que siempre que sea posible acudan primero al servicio más cercano.

El fuego no se propagó más gracias a los materiales con los que se construyen las infraestructuras hospitalarias, que están preparadas para evitar que las llamas se extiendan con facilidad, explicó el consejero del Cabildo de Tenerife José Antonio Valbuena, presente en la rueda de prensa de ayer.

"Quiero poner en valor el trabajo de todos los profesionales sanitarios, no solo de La Candelaria sino de otros centros", que el lunes "demostraron su vocación de servicio público" poniéndose a disposición de sus centros, valoró Conrado Domínguez.

Una enfermera del servicio de urgencias del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria, donde el lunes un incendio provocó su desalojo, relató ayer que "una densa nube negra impedía ver incluso con la linterna del móvil", lo que complicó la evacuación de los pacientes.

La sanitaria, en declaraciones a Efe, recordó que, después de escuchar la alarma contraincendios sobre las 20:45 horas, acudió corriendo a la zona de urgencias de Pediatría pensando que se podía haber disparado por el humo de un cigarro.

Sin embargo, al llegar al área de urgencias pediátricas, donde por suerte había pocos niños, comprobó que había "una gran cantidad de humo negro", que en pocos minutos invadió todo el servicio, en el que anoche trabajaron 30 personas entre médicos, enfermeros y auxiliares de enfermería.

A medida que el tiempo iba pasando, la humareda ganó espacio, y "la angustia, el agobio y el nerviosismo" de los pacientes se incrementó, lo que hizo que el personal sanitario tuviese que trabajar de la manera más rápida y eficaz posible para evacuar cuanto antes a los que allí se encontraban.

Las evacuaciones comenzaron por la puerta principal, pero, después de varios minutos, "fue imposible seguir transitando por esa zona" y tuvieron que seguir con el desalojo por la salida del centro hospitalario, "lo que hizo que la crispación aumentara", narró.

Sigue detenida la supuesta autora

La Policía Nacional mantiene detenida a una mujer como presunta autora del incendio que en la noche del lunes afectó al área de Urgencias del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC), según informaron a Europa Press fuentes oficiales del Cuerpo Nacional de Policía.

Datos contradictorios

Las mismas fuentes señalaron que esta persona no ha pasado aún a disposición judicial y se mantiene en dependencias policiales porque se está trabajando en la información de todo lo acontecido, ya que admitió que existen datos "contradictorios" sobre lo ocurrido.

Efectivos

El servicio de bomberos fue requerido por el personal de seguridad del centro hospitalario a través de la Central de Coordinación de Bomberos de Tenerife en el 112. Hasta el lugar se desplazaron todas las unidades de los parques de Santa Cruz y Laguna, a los que se sumaron los bomberos voluntarios de Güímar (un total de trece vehículos y 42 efectivos).