El bombeo del corazón es vital para continuar nuestra vida. Sin embargo, a veces hacemos que el corazón sufra, y las enfermedades cardiovasculares (ECV) son un perfecto reflejo de ello. Las ECV se han convertido en la causa principal de muerte en muchos países. ¿El motivo? El sedentarismo y la falta de actividad física.

"En un futuro inmediato, con el incremento de la obesidad, habrá un aumento importante de esta patología", como vaticina el cardiólogo Rafael Llorens. El médico asegura que, aunque se tomen en estos momentos medidas para frenar el auge de la obesidad en el mundo, los efectos no podrán verse hasta "una media de 30 años".

Por esta razón, la campaña de este año del Día Mundial del Corazón, que se celebra hoy, lleva el lema de "Mi corazón, su corazón". Para Llorens se trata de una llamada a los padres, porque "debemos formar desde pequeños a los niños" para inculcarles la práctica deportiva, así como para que entiendan los riesgos de no hacerla.

Los canarios, según explica el cardiólogo, han empezado a darse cuenta de la importancia de realizar ejercicio físico en los últimos años. Sin embargo, aún son poco cumplidores a la hora de "comer bien".

"Muchos se piensan que llevar dieta mediterránea y comer sano es como estar a régimen, y hay que acabar con esa creencia", insistió Llorens.

Pero el corazón no solo sufre por la ECV, otras patologías que puede padecer nuestro órgano vital son la insuficiencia cardiaca o el infarto agudo de miocardio.

En Canarias, según la Consejería de Sanidad, el año pasado se registraron 3.106 ingresos por insuficiencia cardiaca y otros 3.126 por infarto agudo de miocardio. Por otra parte, en la comunidad, estas patologías concretas tienen una tasa de mortalidad del 13 y el 25% respectivamente.

El cardiólogo considera que los chequeos cardiovasculares deben realizarse a partir de los 40 años y, que es especialmente importante, hacer caso a los pequeños detalles sintomáticos. "Estar cansado al caminar denota el posible desarrollo de una enfermedad cardiaca", explica Llorens, que recalca que muchos pacientes no acuden a su médico tras sufrir este cansancio por pensar que es otra razón la que lo produce.