Un año más el Día de la Banderita llegó a todos los municipios de las Islas. Los voluntarios de Cruz Roja llenaron de nuevo las calles acompañados de sus tradicionales huchas de la banderita y sus pegatinas de cruces rojas para animar a los ciudadanos a ser más solidarios, bajo el lema "Di sí a la infancia".

Asimismo, se contó con unas 70 mesas petitorias, con el fin de facilitar la colecta, y donde asistieron distintos representantes de instituciones públicas y privadas, para hacer su aportación. Así, durante la mañana acudieron reconocidas figuras políticas como la consejera de Acción Social del Cabildo, Coromoto Yanes, y el alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez.

Concretamente, en la provincia tinerfeña, se ubicaron 44 mesas petitorias, 22 de las cuales se instalaron en la capital, destacando las que se situaron en el exterior del Ayuntamiento, en la Plaza Weyler (enfrente de Capitanía General de Canarias) -y a la que durante la mañana acudieron distintos mandos militares- y en el exterior del Cabildo. Del mismo modo, en la provincia de Las Palmas de Gran Canaria se ubicaron 26 mesas.

Mayte Pociello, presidenta provincial de Cruz Roja, destacó que "los canarios son muy solidarios". Y lo son, según destacó Pociello, no solo para esta ocasión sino en cada gran recaudación que realiza la entidad, como el Sorteo de Oro. Además, como aseguró, el que se acercó a donar también preguntó a los voluntarios y se interesó por los motivos de la recaudación.

Por tercer año consecutivo, los fondos recaudados con esta acción solidaria se destinarán a los proyectos que desarrolla Cruz Roja de apoyo a la infancia vulnerable y juventud y sus familias. El fin es facilitar apoyo escolar, alimentos, materiales de primera necesidad, material escolar, becas de comedor, animación hospitalaria y apoyo psicosocial, gracias a los proyectos que lleva a cabo la entidad. Para los jóvenes, la ayuda también es para la salud, la alimentación y la forma de vida.

"Se trata de un colectivo diana, como las mujeres o los mayores, que tienen más probabilidades de estar en una situación de vulnerabilidad", concluyó Pociello. En esta línea, argumentó que los más pequeños son susceptibles de "sufrir la situación económica de sus padres" y por eso se hace necesario impulsar proyectos que les puedan dar un apoyo extra.