Hoy se celebra el Día internacional de las personas ostomizadas, es decir, aquellas que deben utilizar una bolsa en el exterior de su cuerpo para hacer sus necesidades fisiológicas. Esa "nueva forma de vida" requiere de un proceso de adaptación y de concienciación. Para los pacientes y su entorno familiar resulta fundamental la información y el asesoramiento con el objetivo de llevar una actividad cotidiana "lo más normalizada posible", en función de las características de cada individuo.

Miguel (nombre ficticio) se atreve a contar cómo han sido los últimos meses, tras saber que tenía tumores en su intestino. Explica que "no es fácil; lo mío, personalmente, ha sido todo de sopetón: tienes cáncer, en estado avanzado, no sabemos lo que vamos a hacer, te vamos a poner una bolsa". Señala que "después te dicen que la bolsa va a ser para toda la vida, ya que lo que tienes está muy pegado al ano y no hay remedio para poder cortar".

Este hombre comenta que "se te va el mundo abajo, porque desconoces, en un principio, de qué se trata la bolsa y cómo va a ser tu vida; es un desconocimiento total en los primeros momentos".

Según Miguel, "una vez que conoces la asociación (Asociación de Ostomizados de Tenerife, Aoten), acudes a unas reuniones o te comunicas por whatsapp, para informarte del manejo de la bolsa y del resto de los utensilios, así como de las dificultades que aparecen y que se van solucionando".

Reconoce que "yo no puedo decir que estoy adaptado". Y, como ejemplo, dice que, hace pocos días, cuando estaba con unos amigos, su bolsa se llenó, se despegó de la piel y se manchó la camisa. Ante esos inconvenientes nuevos, ya tiene pensadas algunas soluciones para el futuro. Una de ellas es llevar una camisa de repuesto.

Pero también asegura que existe un método, que se denomina irrigación, por el que la persona ostomizada utiliza una bolsa de agua, a una determinada temperatura, para limpiar de heces su intestino. Y, de esa manera, el afectado puede estar dos, tres o hasta cuatro días sin necesidad de evacuar. En sus actuales condiciones, Miguel piensa que este puede ser el mejor sistema por ahora.

Aclara que "antes llevaba una carterita; ahora es una mochila con muchas cosas, como los repuestos de las bolsas", de las que puede haber muchos tipos. Sobre el futuro, todavía duda entre pedir la invalidez permanente, con lo que recibirá una pensión, o solicitar un puesto de trabajo adaptado.

Miguel insiste en que "no es fácil, pero se puede vivir con este tipo de cáncer, con unas condiciones que no tenía antes y con las que hay que aprender" a salir adelante.

Tiene previsto que, dentro de varias semanas, lo sometan a una intervención quirúrgica para extirparle el colon completo. De esa manera, le quitarán el tumor que le queda y, posteriormente, prevé que le den quimioterapia. Manifiesta que "la vida me ha cambiado, veo las cosas diferentes, hasta el aire que respiro lo disfruto".

Medio centenar de pacientes ostomizados asistieron el jueves de la pasada semana a un taller sobre materiales y accesorios adecuados para dicha patología. La actividad estuvo dirigida por una enfermera estomaterapeuta del Hospital Universitario de Canarias y se desarrolló en un aula del campus de Guajara. La presidenta de la Asociación de Ostomizados de Tenerife (Aoten), Concepción Pérez, explica que, de forma periódica, se organizan diferentes charlas para que los miembros del colectivo se adapten a una nueva forma de vida. Pérez indica que en la Isla puede haber unos 3.000 ostomizados. En un 60% de los casos el proceso aplicado tiene carácter definitivo y en el resto, temporal. El objetivo de estas iniciativas consiste en que los pacientes aprendan a "vivir diariamente con una bolsa", así como que sus familiares y su entorno social también asimilen esa realidad. Los talleres o charlas, así como otro tipo de encuentros, permiten que los ostomizados compartan experiencias, se motiven y cada uno llegue a poder desarrollar "la vida que considere normal". Pérez insiste en que "la actitud de la persona vale mucho", pues se debe afrontar una nueva vida social, familiar y de pareja. Aoten trabaja para la "normalización y visibilidad" de la patología. Hoy habrá mesas informativas en el Hospital La Candelaria y en el Hospital Universitario de Canarias (HUC).