El presidente canario, Fernando Clavijo, y la consejera de Hacienda, Rosa Dávila, reanudaron ayer las primeras reuniones para intentar que haya nuevo presupuesto en 2019, pero lo hicieron jugando en casa, al recibir al portavoz de su grupo (CC), José M. Ruano. Como en el año precedente, la cita sirvió para que, desde sus distintos ámbitos, Ruano se comprometiera a tratar de convencer a otros grupos para que apoyen el proyecto del Ejecutivo y Dávila, a que los ingresos y gastos cuadren. Eso sí, el portavoz nacionalista recalcó que le dan especial relevancia a financiar bien la nueva Ley de Servicios Sociales, que pasa ahora su último trámite parlamentario.

Por supuesto, Ruano pone el acento también en la sanidad, educación y otros gastos sociales. A su juicio, y por lo que le trasladaron ayer Clavijo y Dávila tras las citas con el PP, PSC, NC y ASG, existe un escenario político propicio para un acuerdo, aunque no quisieron adelantar si, como teme Román Rodríguez, ya hay un pacto muy avanzado o hecho con el PP y su propuesta de bajada fiscal.

Dávila recalca que analizarán lo que plantee cada grupo, aunque no apoya una subida fiscal

En este sentido, Dávila insistió en que estudiarán a fondo las propuestas de todos los grupos y recalcó que aún es pronto para tener un cálculo de lo que supondrá, por ejemplo, la reducción del IGIC del PP, si bien con medidas sociales para que no mermar los servicios básicos. Como hasta ahora, la portavoz del Gobierno remarcó que no permitirán una rebaja que afecte a los pilares de la política social, aunque también dejó claro que no abogan por una subida fiscal, lo que aleja un acuerdo con los que proponen una mayor progresividad.