Canarias ha registrado en el último año 54.713 contratos que han implicado la salida del profesional a otra provincia para desarrollar su actividad, un 13,7% más que la cifra registrada en el año anterior, cuando se firmaron 48.119. En cuanto a la tasa de movilidad, en Canarias el 6% de los contratos implican desplazamiento del trabajador, la tasa más baja de España.

Así se desprende de un análisis de la empresa Randstad sobre la evolución de la tasa de movilidad interprovincial de los trabajadores en España en función del lugar de residencia del trabajador y del sector en el que desarrolle su actividad. Para ello, Randstad ha tenido en cuenta los Datos Básicos de Movilidad publicados por el Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE).

El análisis pone de manifiesto que los contratos que implican la movilidad del profesional a otra provincia han registrado la cifra más alta durante el último año. En concreto, durante el pasado ejercicio se formalizaron 2.914.055 contrataciones que conllevaron desplazamiento del trabajador a otra región, un 10,9% más que durante 2016, cuando se registraron 2.627.075 contratos, y el doble que en 2001, la cifra más baja del periodo analizado (1.461.057 contratos)

A nivel nacional, cuando se analiza la serie histórica, 2001 y 2002 fueron los únicos años con menos de 1,5 millones de contratos de movilidad. A partir de 2002, hasta 2007, este tipo de contratos se incrementaron hasta los 2,28 millones. La crisis económica redujo el volumen de contratos de movilidad (medio millón de contratos menos entre 2007 y 2009), situándose en el entorno de los 1,7 millones entre 2009 y 2013. A partir de entonces, los contratos han crecido de manera consecutiva hasta registrar la tasa más elevada de la serie histórica durante este ejercicio, con más de 2,9 millones.

Randstad también analiza la tasa de movilidad de los trabajadores en España y destaca que la cifra registrada este año es la más alta del siglo. Durante el ejercicio anterior, el 13,6% de los contratos firmados implicaba la movilidad del profesional a otra provincia, la tasa más elevada de la serie analizada. Cuando se estudia la evolución del último siglo, se detecta que, durante los seis primeros años, esta cifra osciló entre 11,4% y el 11,8%. Desde 2007 a 2011, este indicador del mercado laboral se situó entre el 12,1% y el 12,4%. 2016 fue el primer año de la serie histórica analizada en la que se superó el umbral del 13%.

AGRICULTURA, EL SECTOR CON MAYOR TASA DE MOVILIDAD.

El sector de actividad en el que el profesional desarrolla su actividad es clave a la hora de analizar la tasa de movilidad. Randstad destaca que agricultura es el sector con mayor índice. En este sector de actividad, casi uno de cada cuatro contratos firmados supone el desplazamiento del profesional a otra provincia. En concreto, el 23,4% de las contrataciones realizadas era de esta tipología. A continuación, ocupando la segunda y tercera posición, están construcción (16,7%) y servicios (11,8%). En última posición, se encuentra industria (10,2%).

Otro aspecto a tener en cuenta es el total de contratos de movilidad formalizados, donde destaca que el 60% se han registrado en el sector servicios, donde se firmaron más de 1,7 millones de profesionales. Agricultura se sitúa en la segunda posición, con un 24,6% de los contratos. Le siguen industria, con 7,7% del total, y agricultura, con un 7,2%.

En términos absolutos, agricultura ha aumentado el número de contratos firmados un 12,3% en el último año, pasando de 639.016 a 717.432. A continuación, se encuentra industria con un incremento del 11,1%, superando los 220.000 contratos, construcción (+10,7%) y servicios (+10,4%).

TASA DE MOVILIDAD.

El informe de Randstad también ha tenido en cuenta la comunidad en la que reside el trabajador, ya que en función de ellos esta tasa oscila entre el 25,8% y el 6%. Castilla-La Mancha y La Rioja son las regiones con mayor tasa de movilidad, ambas con índices superiores al 24%. A continuación, y también por encima de la media nacional, están Castilla y León (16,2%), Murcia (15,3%), Aragón (15%), 14,9%), Euskadi (14,5%), Madrid (14,3%) y Comunitat Valenciana (14%). Andalucía y Navarra se sitúan al mismo nivel que la media nacional (13,6%).

En el lado contrario, por debajo de la media nacional, se encuentran Baleares (12,7%), Galicia (12,4%), Catalunya (11,5%), Extremadura (10,6%) y Cantabria (10,3%). Por debajo del 10%, como regiones con menores índices de movilidad, están Asturias (8,2%) y Canarias (6%).

Por provincias, Cuenca, Toledo, Huesca, Lleida, Guadalajara y La Rioja son las únicas regiones que alcanzan una tasa de movilidad superior al 25%. Mientras que con las menores cifras, por debajdo de los dos dígitos, se sitúan Badajoz, Barcelona, Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife.

En el caso de las provincias canarias, Las Palmas (6,3%) es la que registra la tasa de movilidad más elevada, mientras que Santa Cruz de Tenerife (5,6%) es la que cuenta con la tasa más baja.

El análisis llevado a cabo por Randstad diferencia entre dos tipos de regiones o provincias, las receptoras y las emisoras. Las receptoras son aquellas que reciben más profesionales de los que se marchan a trabajar a otra provincia; mientras que las emisoras son aquellas regiones de las que salen más trabajadores de los que entran.

Actualmente, las principales provincias receptoras de empleados son Madrid y Barcelona, con un saldo positivo de 233.810 y 85.920 trabajadores. Le siguen Baleares (56.483), Murcia (45.393) y Álava (24.313). En España hay diecisiete provincias receptoras.

En el lado contrario, se sitúan Cádiz y Toledo, con saldos negativos de 68.726 y 43.960 trabajadores, respectivamente. A continuación, se sitúan Alicante (37.897), Sevilla (31.876) y Córdoba (31.198). En el caso de Canarias, tanto Santa Cruz de Tenerife como Las Palmas son provincias emisoras de profesionales, con -7.331 y -2.092 empleados.