El Grupo Socialista en el Parlamento de Canarias insiste en que el nuevo tramo del anillo insular, el que enlazará Santiago del Teide con El Tanque y que incluye el complejo túnel de Erjos, contempla solo dos carriles, uno en cada sentido, con lo que puede convertirse en un cuello de botella si no se ejecutan las mejoras deslizadas por el consejero del área en la comisión del pasado lunes.
Fuentes del grupo indicaron ayer a EL DÍA que esas explicaciones de Pablo Rodríguez no les convencen y que, de momento y con contraste con los dos tramos ya ejecutados del anillo (el que va de Buen Paso, en Icod de los Vinos, a la parte baja del casco de El Tanque, y el que une Santiago del Teide y Adeje), no están previstos dos carriles de subida. Esos carriles sí existen ahora en los tramos ejecutados y abiertos, con lo que se produciría una diferencia considerable para el flujo de los vehículos, sobre todo teniendo en cuenta el alto número de camiones, guaguas turísticas y otros vehículos pesados que ralentizan el tráfico históricamente en las vías de esta parte de la Isla.
Según se contempla en el proyecto técnico licitado en el consejo de Gobierno del lunes, la vía a ejecutar ahora tendrá una "calzada simple de 3,50 metros a cielo abierto y doble dentro del túnel, con arcenes de 2,5 metros". Asimismo, se aclara que, durante el recorrido, habrá dos enlaces, uno en El Tanque y otro en Santiago, así como un viaducto, cinco túneles artificiales, cuatro pasos inferiores, dos superiores, una pasarela peatonal, 28 obras de drenaje, 11 muros y el túnel "en mina". Asimismo, y como en los tramos abiertos, la velocidad máxima permitida será de 80 kilómetros a la hora.
Durante la comisión de Carreteras y Obras del pasado lunes, la diputada socialista Patricia Hernández se mostró muy crítica con Rodríguez por los incumplimientos con esta y otras muchas obras en Tenerife y otras islas. De hecho, le preguntó varias veces si solo se preveían dos carriles (uno en cada sentido). El consejero le indicó que se contemplan carriles lentos, pero el PSOE subrayó ayer que, para eso, se han de introducir cambios y mejoras que, de momento, no están en el proyecto.
Rodríguez subrayó que un nuevo proyecto o un cambio de este calibre hubiera puesto en riesgo, de nuevo, los plazos de la obra, si bien admitió que, finalmente, el Gobierno regional sí ha podido hacer la licitación de este tramo, sin necesidad de que el Cabildo adelantara el dinero y ejecutara los trabajos.
Esto le fue elogiado por Hernández, quien, por el contrario, criticó a Fernando Clavijo y al presidente del Cabildo tinerfeño, Carlos Alonso, por anunciar en 2017 que la Administración de la Isla podía adelantar los recursos y hacerse con la gestión y ejecución del proyecto. A su juicio, queda probado que el PSOE tenía razón.