"El Consejo de Estudiantes no ha arrancado en estos cuatro años, no ha sido posible constituirlo. Pero no porque no quieran que lo presida el rector, lo cual me parece bien, sino por la doble concepción sobre su funcionamiento: asambleario o reglado de manera orgánica", asegura el rector de la Universidad de La Laguna (ULL) Antonio Martinón.

El pasado diciembre, la ULL renovó la representación del alumnado en el Claustro, cuyo mandato es de dos años. Hace unos días tuvo lugar un primer encuentro de los cabezas de lista de las cinco formaciones con el rector y el vicerrector de Estudiantes, José Manuel García Fraga. La reunión sirvió para que el Rectorado les diera la bienvenida y para establecer un plan de trabajo conjunto.

La ULL les cede unos espacios de reunión en la Torre Profesor Agustín Arévalo, en el Campus Central. En la propia cita, los estudiantes se pusieron de acuerdo para asignarse los despachos, al tiempo que conocieron el presupuesto de la institución para sus actividades.

El vicerrector comentó el interés en modificar la normativa que rige el funcionamiento del Consejo de Estudiantes, órgano que no ha calado en la comunidad universitaria y permanece inactivo. El actual modelo no es el deseado por el alumnado y se consideró oportuno el cambio para que al frente esté un representante suyo.

García Fraga se interesó por la valoración de los estudiantes respecto al calendario académico del curso pasado y también quiso conocer su parecer sobre la redacción de una posible normativa que regule las peticiones de cambio de turno. Igualmente solicitó la participación en diversos órganos de la universidad lagunera.