El Gobierno de Canarias hizo públicos ayer los nombres de los galardonados este año con las Medallas de Oro de la Comunidad, entre las que, en el ámbito social, destaca la concedida a la Asociación Corazón y Vida y al programa de mayores Ansina, del Cabildo de Tenerife.

Se premia así la trayectoria de una de las entidades sin ánimo de lucro que más se ha implicado con los pacientes y familiares de cardiopatías congénitas, así como con otras patologías no tratadas en Canarias con el objetivo de aportar la mejor calidad de vida posible a los enfermos.

En el caso del programa tinerfeño, se reconoce a una de las iniciativas sociales, culturales y deportivas que mejores resultados ha logrado en el Archipiélago en la participación de los mayores en la vida comunitaria. Además, partiendo siempre de sus propias preferencias.

Como es tradición con estos premios creados en 1986, los reconocidos los recibirán en el acto institucional del 30 de mayo, con motivo del Día de Canarias. En este caso, la ceremonia tendrá lugar en el auditorio Alfredo Kraus, de Las Palmas de Gran Canaria, y será una jornada muy especial para, entre otros galardonados, las hilanderas de seda de El Paso, en La Palma, así como para las jugadoras, técnicos, directivos y afición de la Unión Deportiva Granadilla Egatesa, equipo femenino de fútbol que se ha convertido en un referente del deporte canario.

El próximo lunes, en el consejo de Gobierno y a propuesta del presidente, Fernando Clavijo, también se confirmará el nombre de Octavio García Hernández, si bien en este caso a título póstumo (1931-2018). Se trata de uno de los 200 homosexuales que fueron encarcelados en la colonia agrícola de Tefía (Fuerteventura) por la ley de Vagos y Maleantes de la dictadura franquista. Como relató cuando el país recobró la libertad, vivió en condiciones infrahumanas y, como los demás, fue humillado y vejado por su condición sexual, aunque su entereza y lucha sirvió para difundir otra de las atrocidades del régimen.

Las medallas reconocen también al jugador grancanario de balonmano Dani Sarmiento, quien, a sus 35 años, presenta una de las trayectorias más completas del deporte isleño, con participaciones en mundiales, europeos, ligas de campeones o torneos nacionales en diversos equipos, así como 100 internacionalidades.

A su vez, se le entrega a Ángel Manuel Hernández, pastor que lidera en Fuerteventura la comunidad evangelista mayor de España y la sexta de Europa tras solo dos decenios de trabajo y compromiso social. Asimismo, se rendirá homenaje al pastor herreño Manuel Padrón Montero (El Pinar), quien, pese a sus estudios básicos, fundó la Sociedad Cooperativa de ganadores de El Hierro y ha luchado por el pastoreo tradicional hasta que se jubiló, colaborando en investigaciones lingüísticas y biológicas.

En el ámbito etnográfico y de tradiciones, se le entregará la medalla a El Ramo de Arure, en el municipio gomero de Valle Gran Rey, una de sus costumbres festivas más ricas. Sin salir de esta modalidad, se rendirá tributo a la Agrupación Folclórica de Coros y Danzas de Arrecife, con 60 años de defensa de la música canaria tradicional.

En cuanto a las empresas o cooperativas, la medalla recae en la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos de Canarias (COAG). Además, y en el ámbito educativo, el reconocimiento recaerá en Berylk Prichard, quien abrió en 1972 el colegio Cantebury, en Ciudad Jardín (Gran canaria), que ahora cuenta con 1.200 alumnos (5.000 en total) y 130 trabajadores.