Los herreños viven con extraordinaria alegría y emoción este primer domingo de abril. El obispo de la Diócesis Nivariense, Bernardo Álvarez, presidió ayer los actos de reapertura de la ermita de La Dehesa, con la imagen de Nuestra Señora de los Reyes ya restaurada.

La imagen de la Madre Amada había permanecido al culto público en la parroquia de la Villa de Valverde, desde el pasado 12 de diciembre y hasta el 16 de enero, debido al cierre provisional de su morada: el Santuario de La Dehesa.

Todo ello como consecuencia de las obras realizadas tanto en el edifico de la ermita, como también por la restauración de la talla de la imagen.

Los actos comenzaron en el exterior del templo, donde el arquitecto Javier Álvarez explicó los detalles de las obras realizadas en el recinto mariano, unos trabajos que han sido financiados mediante una subvención directa por parte del Cabildo Insular al Obispado.

Posteriormente, se abrieron las puertas del santuario para que pudieran acceder los fieles y contemplar la imagen de la Madre Amada en su retablo.

El restaurador de la patrona, Rubén Sánchez, expuso, apoyándose en algunas imágenes, los pormenores del proceso llevado a cabo en la talla de la Virgen, una intervención financiada por la Fundación Virgen de los Reyes. A continuación, el obispo presidió la solemne eucaristía.

Las obras que se han llevado a cabo en el Santuario de la Virgen de los Reyes se debieron al deterioro que presentaban las carpinterías, el pavimento exterior y los aseos. En este sentido, se mejoró el cuarto de peregrinos, se han adaptado los baños a las personas con movilidad reducida y se han impermeabilizado los techos.

En cuanto a la imagen, el grueso de los tratamientos puede resumirse en el reajuste mecánico de partes móviles, optimización de anclajes entre piezas y atributos, fijación de capa pictórica, limpieza y decapado selectivo de policromías, corrección de adhesiones, tratamientos preventivos de ataque biológico, retoques de color bien ajustados y protección de policromías.