La factoría Lemus-Martell está de enhorabuena y, por lo visto en su presentación, promete dar que hablar en el nuevo Carnaval. Y eso, sin que desvelaran ningún efecto. Pero tienen magia.

Fundados en el año 2003, lucen uno de sus fantasías más elegantes de los últimos años, un chaquetón tres cuartos en el que predomina el rojo, de las mejores creaciones de Alexis González. Y por si fuera poco les sirve de abrigo para, en plan políticos, interpretar uno de sus temas de los dos que desvelaron el sábado pasado.

Zeta-Zetas presenta su propia candidatura a las elecciones. Es el hilo conductor de un tema crítico, en el que las voces hicieron las delicias del público gracias al trabajo desarrollado por Pablito Moreno. Su segundo, sin desvelar ningún efecto especial -identidad de la sociedad Zeta-Zetas-, desprende magia, y tal vez abusa de un detalle extemporáneo para apuntalar una canción de murga que va sobrada y bien podría ser un éxito del Carnaval, hasta el punto de "encender" al público y ponerlo en pie cantando y bailando con ellos. Un espectáculo que no renuncia a buenos argumentos desde el ingenio. Eso, aderezado con la magia de su pasacalle y despedida, y con Javier Lemus, que entusiasma al público. La velada de presentación fue "media final", pues contaron con la actuación de Triqui-Traques, Ni Pico-Ni Corto y Bambones. Todos, con pasacalles y despedida, salvo Bambones, que hizo tarea y preparó un "chío, chío", con recado a los "zeta" que suben a su tasca los viernes. Zeta Zetas trae triunfos.