Una de las mejores cosas que hay en la vida es ir a vender algo que ya está vendido. Es lo que ha hecho una delegación del Gobierno de Canarias, encabezada por el presidente, que se fue a Los Ángeles a vender las islas como emplazamiento para rodajes. Lo hace cuando ya se han rodado aquí importantes superproducciones como Furia de Titanes, A todo gas 6, Exodus o En el corazón del mar, entre otras. El tema del cine es un viejo proyecto de las islas que en su día se promocionaron como plató natural. "Canarias, la vuelta al mundo en siete islas" o algo así se llamaba el invento que presentaba la maravillosa diversidad de paisajes que tiene este archipiélago (bosques prehistóricos, dunas de un desierto, llanuras abruptas de un planeta volcánico, playas caribeñas...) a muy poca distancia unos de otros. Y con medios de producción y profesionales disponibles. Darse un viaje no está mal. Y vender las islas tampoco. Pero un poco tarde llega la cebada al rabo.