El pasado miércoles 30 de mayo, dentro de los actos institucionales del Día de Canarias, se entregaron las Medallas de Oro de Canarias 2018. Unas de las galardonadas fueron las loceras de La Gomera. La cerámica es una herencia de técnicas prehistóricas que se fusionaron en Canarias con modelos de trabajo venidos de España y Portugal. Tal y como se recoge en el acta de concesión del premio, en La Gomera hay constancia de varios centros alfareros especializados, al menos desde el siglo XVII. Un oficio tradicional practicado exclusivamente por mujeres y que se ha transmitido de madres a hijas.

Hace unos años fui con mis compañeros de Licenciatura de Sociología de la Universidad de La Laguna Josué Gutiérrez Barroso y Jorn Vera Koster a La Gomera a hacer un trabajo de investigación etnográfica sobre "Las hogueras de San Marcos" en Agulo, que consisten en la construcción de una sucesión de hogueras hechas con leña de sabina, que se van situando en la calle principal bordeando la plaza Leoncio Bento, donde se encuentra la iglesia de San Marcos. Posteriormente, es apasionante contemplar el salto de los vecinos una vez encendidas las hogueras. Contamos para la realización de dicho estudio con las aportaciones de la historiadora Rosa María Chinea Segredo, actualmente alcaldesa de ese municipio gomero.

Al día siguiente, nos trasladamos al barrio de El Cercado, en Chipude, en Vallehermoso. Admiramos durante más de una hora los numerosos trabajos de las loceras y estuvimos charlando con Rufina González Niebla. Con sus manos encallecidas por el arduo trabajo, Rufina nos explicó las diferentes técnicas para la realización de los trabajos de cerámica, cómo las había aprendido desde pequeña, y que pensaba seguir haciéndolo mientras sus fuerzas se lo permitieran, que fue hasta el año 2014. Se sentía feliz de mostrarnos todo lo que había aprendido y estaba dispuesta a enseñar a todos. Le compré algunos de sus trabajos de cerámica, que conservo con todo orgullo en mi domicilio.

La materia prima de esta cerámica de las loceras de La Gomera es la arcilla, la arena y el almagre. En cuanto al modelado no se utiliza el horno, sino que la técnica empleada es el urdido. Y se realizan una gran variedad de piezas tradicionales entre las que podemos destacar la vasija del aguardiente, el tiesto de gofio, el tiesto de café, la talla, el verdegal, el brasero o anafre, el carabuco, el escurridor de papas, cazuelas y fuentes. Y en cuanto a las piezas modernas cabe destacar el asador de castañas, el lebrillo y el gánigo.

Por lo que se refiere a la cocción hay un empleo generalizado del horno de cámara o directo, que es una solución intermedia entre el horno al aire libre y el horno árabe, tal y como señala Rafael González Antón, en su obra "La alfarería popular en Canarias".

Las loceras de La Gomera, artistas de un trabajo ejemplar e imperecedero. La justicia de un premio más que merecido. La continuación de una de las tradiciones más perdurables en la cultura de los pueblos: un proceso de aprendizaje que se ha transmitido de generación en generación hasta llegar a nuestros días.

Un orgullo para todos.

*Presidente de TuSantaCruz