Al fin, don Rafael Yanes fue designado Diputado del Común. Y, al fin, don Jerónimo Saavedra pudo cumplir su deseo de dejar el cargo. A ambos les he tenido y tengo un gran aprecio. Y por ello me permito verter el siguiente comentario.

Recientemente se le hacía una entrevista en un medio local a don Rafael Yanes con motivo de su designación (tortuosa por el quehacer de los parlamentarios). En un pasaje de la misma y refiriéndose a don Pedro Sánchez, el entrevistador le preguntaba: "Usted es socialista. ¿Estará orgulloso de verle presidente?". Don Rafael Yanes respondía: "Cuando era socialista (tuve que renunciar para aceptar el cargo) aposté por Pedro Sánchez y es una satisfacción verle presidente".

Querido Rafa, tú sabes que eres tan socialista como lo eras siendo alcalde de Güímar; y como lo eras antes de ser alcalde; y como lo eras doctorándote en Periodismo; y como lo fuiste antes de todo eso. Ser socialista es un sentimiento, se lleva dentro. Ser socialista no es solo una afiliación. Es posible que ahora hayas dejado tu afiliación al PSOE por necesidad del cargo que has de desempeñar, abierto a toda condición ciudadana y sin ligaduras a cualquier condición partidista. Pero siempre serás socialista, por eso, por sentimiento. Como yo no dejé de serlo porque me expulsasen del partido. Y creo que tú lo sabes, por la afabilidad que nos hemos correspondido a lo largo del tiempo. Dejé de ser afiliado al PSOE (por "imperativo legal", como suelen pronunciarse al prometer la Constitución algunos chafalmejas con acta de diputado o senador), pero no dejé de ser socialista. Como no lo dejaron de ser otros compañeros en aquellos días aciagos de "pragmatismo frente a idealismo": Alonso Puerta, Pablo Castellano, García Damborenea y tantos otros que se vieron defenestrados.

Ser socialista es una cosa. Estar afiliado al Partido Socialista puede ser otra cosa bien distinta. ¿Cuánta gente se afilió al PSOE tras nuestro triunfo electoral en 1982? ¿Acaso no hubo un aluvión de "pancistas" que no tenían más norte que estar al sol que más calienta?

Don Rafael Yanes, Diputado del Común, desde el gran aprecio a tu persona te deseo una gestión que, al menos, siga la senda de don Jerónimo Saavedra y, como él, anclada en aquel sentimiento.