El sector de la construcción europea representa un 9 % del producto interior bruto (PIB) y genera empleo para 18 millones de personas. Constituye un importante motor de crecimiento económico y se encuentra inmerso en un conjunto complejo de desafíos en el ámbito económico, medioambiental y social. A pesar de la «revolución digital» en la que estamos inmersos distintos sectores, la construcción viene aportando mejoras modestas en términos de productividad. La investigación, el desarrollo y la innovación son componentes cruciales para hacer frente a estos desafíos.

El informe de 2016 sobre el papel del sector de la construcción en el crecimiento económico, del Consejo Económico de España, pone también de manifiesto su importancia cuantitativa, directa e indirecta, en la economía y en el empleo, así como también su aporte en el desarrollo de redes, infraestructuras y equipamientos para la mejora de la calidad de vida y la cohesión territorial y social. Este informe señala que "la actividad constructora presenta niveles relativamente bajos de innovación en las empresas" y que los procesos de internacionalización de la industria española de la construcción no serían viables sin una elevada capacidad tecnológica y una alta productividad capaces de sustentar una posición en mercados que son muy competitivos.

La digitalización en el sector de la construcción avanza de manera lenta pero segura. Un camino que pasa inexcusablemente por adoptar la metodología BIM (Building Information Modeling) o, lo que es lo mismo, por construir edificios de forma virtual antes de hacerlo físicamente para así poder anticiparse a los problemas que puedan surgir. La aplicación de esta tecnología para la gestión integral de los datos del edificio, desde su diseño hasta el mantenimiento durante su vida útil, requiere de un trabajo multidisciplinar, lo que requiere cambios en las formas de trabajar.

Los gobiernos y los clientes del sector público se enfrentan a importantes desafíos para estimular el crecimiento económico y la competitividad y, al mismo tiempo, mejorar la rentabilidad de las inversiones públicas a través de una introducción más amplia de BIM. El manual para la introducción de la metodología BIM por parte del sector público europeo recomienda utilizar políticas gubernamentales y métodos de contratación pública, utilizadas para apoyar esta transformación fundamental del sector. Sin este liderazgo "top-down" es probable que el sector prosiguiera con una adopción baja y desigual de la tecnología de la información, lo que limitaría sus oportunidades de lograr una mejora significativa de su productividad y su rentabilidad.

La Directiva 2014/24 / UE sobre contratación pública establece la necesidad de utilizar sistemas electrónicos (es decir, medios de comunicación y herramientas para modelar datos del edificio), en los procesos de contratación de obras, servicios y suministros a partir de septiembre de 2018. Esta directiva indica que los estados miembros exijan el uso de herramientas de modelado electrónico de datos de las construcciones (el uso de éstas en las especificaciones técnicas, haciendo referencia a estas consideradas desde el ciclo de vida y no sólo a los costes directos de construcción).

Se pueden encontrar algunas experiencias pioneras de implantación por parte de las instituciones y administraciones públicas, e iniciativas para promover la divulgación, la definición de estándares, la docencia y formación, y grupos de trabajo promovidos por el Ministerio de Fomento y en el ámbito de las comunidades autónomas. La estrategia nacional esBIM (http://www.esbim.es) del Ministerio de Fomento está actualmente en marcha y trabaja en distintos ámbitos de actuación con el objetivo de implantar metodologías BIM en la obra pública. El horizonte temporal de implantación que se baraja señala finales del 2018 para el ámbito de la edificación y mediados del 2019 para las infraestructuras civiles. La definición de estándares abiertos se determina como uno de los principales retos para el proceso de implementación del BIM.

A mediados de julio hemos formado en la Universidad de La Laguna a más de sesenta técnicos de distintas áreas del Cabildo de Tenerife en metodología y procesos BIM, con la vista puesta en ese proceso de digitalización del sector. En 2017 se celebró también un plan de formación para profesionales patrocinado por el Cabildo y en 2015 las primeras jornadas BIM Canarias.

Ahora el reto está en establecer una "Hoja de Ruta Canaria", como iniciativa que promueva formas de trabajo más productivas que mejoren la competitividad en Canarias. Una hoja de ruta que no solo busque aumentar la eficiencia y la productividad de la industria, sino que también busque apoyar a la pequeña y mediana empresa (pyme), que representa casi el 95% del sector.

Algunas comunidades autónomas ya tienen iniciativas en este ámbito. La Consejería de Infraestructuras de la Generalitat de Catalunya ha propuesto como horizonte el año 2018 para que se requiera metodologías BIM en las licitaciones públicas. El Gobierno vasco, en su plan estratégico 2016-2018 y de cara al horizonte de 2020 así como con la estrategia europea de especialización inteligente RIS3, ha establecido el comité de implantación "BIM Euskadi 2020" en la que desarrolla su hoja de ruta en este ámbito. El Gobierno valenciano ha puesto en marcha la "Mesa BIM Comunidad Valenciana" a principios del mes de julio de 2016 con la pretensión de crear, en primer lugar, objetivos y posibilidades de conectar con otras iniciativas nacionales.

El laboratorio BIMLab (http://bimlab.ull.es) del Departamento de Técnicas y Proyectos en Ingeniería y Arquitectura de La Universidad de La Laguna viene trabajando desde hace algunos años en líneas de investigación en Modelos BIM, con proyectos competitivos de investigación en el desarrollo de distintos prototipos y herramientas. Se hace necesario que el Gobierno de Canarias apoye proyectos piloto de experimentación que permitan mejorar la competitividad de un sector estratégico para Canarias.

*Profesora contratada, Doctor del Departamento de Técnicas y Proyectos en Ingeniería y Arquitectura de la Universidad de La Laguna, arquitecta técnica por la ULL, Licenciada en Documentación por la Universidad Oberta de Cataluña y Doctora en Ingeniería Gráfica por la Universidad Politécnica de Valencia