No hay manera. Una vez más, desde el Gobierno estatal han humillado a nuestra Comunidad Autónoma utilizando los presupuestos generales con "engaños y atropellos", según ha denunciado el presidente canario, Fernando Clavijo. Da lo mismo que gobiernen los "populares" o los socialistas-obreros. Debe recordarse la formidable dedicación hacia nuestras Islas del entonces ministro Soria enfrentándose abiertamente a Paulino Rivero (nefasto período ignorado actualmente por Asier Antona… que lo alaba), y de las maniobras orquestadas por el obrero López, hoy con un mísero sueldo en Europa de miles de euros mensuales y con su partido roto en toda España. Queremos decir que no es necesaria la presencia canaria en el Consejo de Ministros ya que solo los godos se encargan de dominar Canarias y, en esta ocasión, con una sonora bajada de pantalones ante unos independentistas y terroristas para mantener en la poltrona de la Moncloa a un presidente que juega a la ruptura de España. Grave. Personajillos y personajillas, que nunca fueron nada, se han subido a un carro peligroso con un brillante futuro breve que les espera en esta autocomplaciente organización política. Sin embargo, no hay que pasar de soslayo por la clase política canaria, llena de advenedizos nadando en una mar de mediocridades pero, también, lo suficientemente listos, unos y otras, para ir generando un fenómeno político que perjudica a la colectividad. Es decir, desde Madrid se ofende a este territorio pero, desde aquí y con los de aquí, se ha logrado un retraso de treinta años en todos los ámbitos. Se empujan entre sí. Un ejemplo reciente: la compra del edificio-caja de Cabo Llanos lesiona seriamente no solo al Cabildo tinerfeño, sino que salpica al Ayuntamiento capitalino. Y esto no es nada constructivo para las dos instituciones que, por supuesto, no tienen argumentos para echar culpas a Madrid. Es una muestra de lo que se cuece aquí mismo. La práctica de la coherencia parece que llega desde el Sur y en ella deben mirarse.

Como decimos, no solo este Gobierno de Sánchez sino igualmente el de Rajoy han ignorado a esta tierra olvidando multitud de compromisos presupuestarios. En los de 2018, son únicamente 327 millones de euros los que se han arrinconado en las gavetas de los ministerios, nada más y nada menos que como ¡fondos contra la pobreza!, potabilizadoras, desalación, carreteras o aguas. Estas decisiones fueron fruto del titánico esfuerzo de los artistas de Rajoy para con Canarias. Pero es que en 2019, otro artista vinculado a reactores y helicópteros ha agravado la situación, desapareciendo, y surgiendo en otra comunidad, las partidas destinadas a infraestructuras educativas, turísticas, depuración de aguas y obras hidráulicas. ¿Recuerdan, no hace un mes, aquella pomposa ceremonia celebrada en un despacho enmoquetado de Madrid, donde se recogió (¿o se recogía?) la firma del protocolo para la ejecución de Obras Hidráulicas de Canarias? Un concienzudo trabajo realizado por los técnicos de la Consejería de Agricultura y Aguas del Gobierno de Canarias, simplemente tirado a una papelera situada estratégicamente en un rincón de aquel despacho. El Estatuto de Autonomía y el REF liquidado en un pispás por una cuadrilla de godos. Canarias no interesa y sí las cuatro provincias catalanas que, entre otras prebendas, disponen del AVE en cada una de ellas. Aquí, pobrecitos, seguimos con la carretera de La Aldea y con el cierre del Anillo Insular.

Pero no hay mal que por bien no venga. Los de Coalición Canaria no deben estar contrariados del todo, pues esta vil comedia política en perjuicio de nuestro Archipiélago se ha convertido en una campaña gratuita a favor de los neonacionalistas canarios. Con permiso de nuestros pacientes lectores, reproducimos unas líneas publicadas aquí hace un mes y que, sin quererlo, nos convirtieron en agoreros de la política. "Ábalos, mientras tanto y sin que ninguno de sus asesores le tocara la trompeta advirtiéndole de sus dislates con Canarias, les hace la campaña electoral gratuitamente a los de Coalición Canaria, que, frotándose las manos, comprueban cómo un ministro, por un lado indigna a los canarios (no garantiza nada. Al contrario, lo enturbia todo), les facilita su permanencia en el poder. Él mismo anunció la firma del convenio de carreteras para el pasado 21 de este mes. Esta indeseable situación es trasladable al incumplimiento con los convenios de obras hidráulicas, plan de la pobreza, agricultura, playa de Valleseco, depuradora de Santa Cruz. Una auténtica estafa, ya que ese dinero irá a parar a otras comunidades más perturbadoras. Entre ellas, por supuesto, Cataluña, a la que el Consejo de Ministros ha dedicado 120 millones para la ¡conservación de sus carreteras!". Días después, demostrando el carácter dialogante de este Gobierno, el presidente Sánchez se trasladó a Gran Canaria, donde colocó la guinda asistiendo, eso sí, a una reunión de "su" partido. ¿Quién les iba a decir a los de Coalición Canaria que en esta próxima campaña podrían pasarse sin sus valedores habituales?