Los cinéfilos estamos de enhorabuena porque la semana que viene llega a la cartelera la última propuesta cinematográfica de David Cronenberg. "Maps to the Stars", que le valió el premio a Mejor Actriz a Julianne Moore en el último Festival de Cannes, disecciona la obsesión por la popularidad de la sociedad contemporánea. De la cascada de estrenos conviene destacar también "En tercera persona", de Paul Haggis (el artífice de "Crash"), en la que vuelve a hilvanar varias historias. Esta vez aborda tres romances en tres ciudades diferentes.

Por su parte "Selma", una de las nominadas a mejor película en los Oscar, narra la lucha de Martin Luther King Jr. en defensa de los derechos civiles en la década de los 60 del siglo pasado. La irlandesa "Calvary" nos cuenta la historia de un sacerdote católico comprometido con su parroquia. Formó parte de la sección oficial del último Festival de Gijón. John Hilcoat regresa con una cinta de cine negro ambientada en la época de la ley seca. Su título: "Sin ley".

Los que tengan ganas de comedia podrán ver"Perdiendo el norte" o "Zombiavers". A los que les guste la animación nipona tienen su título en "Los caballeros del zodíaco". La argentina "Refugiado" ofrece un drama familiar. "La luz con el tiempo dentro" es una biografía del poeta Juan Ramón Jiménez. Los que busquen terror pueden ver "Oculus: el espejo del mal". Por último, la surcoreana "The Target" promete acción a raudales. Sea cual sea su elección no dejen de ir al cine.

El incombustible Clint Eastwood vuelve por sus fueros después de la pequeña decepción del variopinto musical "Jersey Boys" (2014). El artífice de obras maestras incontestables como "Sin perdón" (1992), "Los puentes de Madison" (1994), "Mystic River" (2003), "Million Dollar Baby" (2004) o "Gran Torino" (2009) firma una notable película con "El francotirador", su filme número 34 como director.

Pauline Kael escribió el 15 de enero de 1972 en "The New Yorker" una crítica titulada "Saint Corp" con ocasión del estreno de "Harry, El Sucio" (1971), que protagonizaba Clint Eastwood, en la que tildaba el filme de fascista. Esta opinión marcó durante más de una década la percepción de gran parte del público de Eastwood. Tuvo que transcurrir una década, en la que dio el paso a la dirección y firmó notables títulos como "Infierno de cobardes" (1973), "El fuera de la ley" (1976) ¬-"Positif" llegó a definirla como "ese Mein Kampf del Oeste- o "Ruta suicida" (1977), para que la percepción del público comenzara a cambiar.

Ahora, a sus 85 años ha conseguido crear un largometraje que ha generado una inusitada controversia con detractores como Michael Moore o defensores como Jane Fonda. La mayoría de las opiniones que he leído y escuchado sobre "El francotirador" se quedan en la epidermis de lo ideológico y no van a la dermis fílmica. Quien haga una lectura ideológica de la película se estará equivocando porque Eastwood solo quiere mostrar la experiencia vital de un militar en concreto, jugando con la oposición entre realidad y mito, sin pretender hacer un análisis global de la intervención de Estados Unidos en Irak. Clint Eastwood es un patriota crítico con su país como ya lo demostrara con el díptico "Banderas de nuestros padres" (2006) / "Cartas desde Iwo Jima" (2006), en la que mostraba la Segunda Guerra Mundial desde la facción estadounidense y desde el bando nipón.

"El francotirador" no incurre en la visión estereotipada del Oliver Stone de "World Trade Center" (2006) ni en el patriotismo desaforado del Steven Spielberg de "Salvar al soldado Ryan" (1997) y la prueba radica en que a los tres minutos de metraje ofrece un magistral "flashback" de 24 minutos, en el que Eastwood lleva al espectador a la infancia de Chris Kyle, futuro marine que apodarán La Leyenda por abatir 160 objetivos con precisión milimétrica, el día que su padre le inicia en el ritual de la caza, luego a su juventud como "cowboy" de rodeos, a su instrucción militar ("El sargento de hierro", 1986, en el recuerdo) y, por último, a su enamoramiento y casamiento.

El duelo entre La Leyenda y El Carnicero (antiguo medallista olímpico libio) tiene más de licencia cinematográfica que de verdad. Lo que sí es 100% verídico son las imágenes de los títulos de crédito finales, secundadas por el tema "The Funeral", de Morricone, en las que se muestran las exequias del verdadero Chris Kyle.

Conviene recordar que Clint Eastwood, junto a Woody Allen, representa la excepción artística en una industria como la de Hollywood volcada en el entretenimiento. No será hasta 1980, cuando el MOMA de Nueva York proyecta cuatro de sus películas, cuando la crítica empiece a valorar su obra. Aunque no lo suficiente, ya que Orson Welles afirmó en 1982 que Eastwood era "el realizador más subestimado del mundo". En 1985, año en que participa por vez primera en el Festival de Cannes con "El jinete pálido", la Cinemateca francesa le dedicó una retrospectiva completa de su filmografía. Los cuatro Oscar por "Sin perdón" y otros cuatro por "Million Dollar Baby" lo terminaron por encumbrar. En 1998 recibió de manos de Jean-Luc Godard un César honorífico. Mató definitivamente el fantasma de Harry, El Sucio con la magistral "Gran Torino". Que nadie lo resucite.

ficha técnica

"El francotirador"

Estreno en España: 20 de febrero

País: Estados Unidos

Duración: 132 minutos

Guion: Jason Hall

Dirección: Clint Eastwood

Fotografía: Tom Stern

Música: Clint Eastwood y Ennio Morricone

Montaje: Joel Cox y Gary D. Roach

Género: Bélico

Intérpretes: Bradley Cooper, Sienna Miller, Luke Grimes, Jake McDorman