Es perfectamente consciente de los celos que genera en cada uno de los movimientos que realiza sobre el tablero musical del Archipiélago; también de las enormes dificultades que conlleva armar una agenda como la que ha diseñado para el XI Festival Mar Abierto. Jairo Núñez, director de ArteValle Producciones, sabe que en este país la envidia es el deporte nacional y que más de uno le tiene ganas, es decir, que como se suele decir: lo esperan en la bajadita. "Nada de esto se consigue sin planificación, sin un trabajo en equipo y, sobre todo, sin una trayectoria que avale que no somos una productora al uso", enumera en relación a la nómina de artistas que ha reunido en los 18 conciertos de esta temporada.

Noa, Dani Martín, que es la cita programada para el sábado 20 de mayo en el Auditorio de Tenerife, Loquillo, Luis Fonsi, Carlos Vives, Maluma, David Bisbal, Dios Salve a la Reina o Barbara Hendricks es una alineación de galácticos que Núñez intentó mejorar. "De todos los nombres que barajamos en un primer momento hemos logrado traer la mitad... Al principio solo teníamos seguro a Luis Fonsi y Bisbal, el resto son grandes reclamos que fueron cayendo después de largas negociaciones", cuenta en el arranque de una conversación en la que Jairo Núñez filtra algún que otro fracaso. "No todo sale bien; llevo siete años tratando de traer a Raphael y aún no lo he podido cerrar", desvela con un tono distendido mientras agota el primer sorbo de una cerveza con limón.

"Nunca está todo lo que quiero". Esta frase da pie para preguntarle al máximo responsable de ArteValle Producciones cuáles son los pasos que debe dar el festival en los próximos años. Hemos tocado a Bob Dylan, Jamiroquai o Sting y en el futuro haremos algo para un público más anglo, aunque no sabemos cómo va a funcionar. Este es un mercado muy complejo en el que hay dos realidades. Uno, en Tenerife, que está más próximo a lo latino por la incidencia del carnaval y de las murgas. El otro, el que existe en Las Palmas de Gran Canaria, es algo más internacional y está marcado por una mayor tradición cultural que está ligada al festival de ópera. Tanto en los gustos musicales como en lo que hace referencia a cómo se mueve la publicidad hay unas diferencias bien marcadas.

Respecto a las influencias latinas que destila el XI Festival Mar Abierto, Jairo apunta que el listado de esta edición "se completó por un cúmulo de circunstancias y causalidades que hemos tratado de rentabilizar al máximo... Yo no digo que no exista la sensación de que este año es más latino que otras veces, pero Noa no es una artista de género latino, Dani Martín tampoco, Loquillo tres cuartos de lo mismo y Dios Salve a la Reina y Bárbara Hendricks también están fuera de este apartado", aclara.

El arquitecto de Mar Abierto, que en el pasado ya trazó los planos del Festival Musitemático, considera que la única realidad es que "esta es la oferta musical más atractiva que se puede ofrecer hoy en las Islas y uno de las más destacadas a nivel nacional. ¿Existe en Canarias alguna productora que programe 18 conciertos en un año de este nivel? Sinceramente, yo no conozco a nadie que esté realizando una apuesta tan potente como la que abandera ArteValle: contamos con un equipo fijo de ocho profesionales y a lo largo del festival generamos unos 300 puestos de trabajo", reivindica un empresario que en los últimos años ha movilizado entre 60.000 y 80.000 personas en los conciertos que organizó una marca que para la edición de 2017 espera rozar una asistencia cercana a los 100.000 espectadores. "Mi intención no es ganar muchos millones para comprarme un Ferrari y una mansión en Las Bahamas. Aquí las ganancias vuelven al festival".

A juicio de este gestor cultural, en el Archipiélago se está produciendo una burbuja de conciertos que no es sostenible. "Esto da lo que da y algunos acabarán cayendo porque tienen una estrategia ventajista, que es lícita, pero que nada tiene que ver con las formas que utiliza ArteValle Producciones. Yo nunca me voy a negar a colaborar con otros compañeros que quieran dinamizar el sector. De hecho, no descarto participar en un proyecto compartido si es rentable para todas las partes, pero existe una libertad de mercado que cada uno aprovecha en base a unos intereses... Algunos montan un concierto, se llevan el dinero y desaparecen el resto del año. Mar Abierto no funciona así; aquí hay un proyecto con una mayor profundidad".

"Yo no soy un hombre y un teléfono", alerta el entrevistado tras revisar un WhatsApp. "Cuando se abre una negociación me ocupo de transmitir personalmente toda la información a la parte que queremos contratar, es decir, que no entro en pujas telefónicas", precisa sobre un capítulo en el que aflora el Jairo Núñez más belicoso. "El gobierno canario pone 5.000 euros a un festival con un presupuesto de casi dos millones y este año nos hemos asegurado que el Cabildo entre, pero esas cantidades son de risa si tenemos en cuenta la imagen de las Islas que proyecta Mar Abierto", censura sin reprimirse al contar que él "no observa ninguna recuperación económica en el sector cultural. Si la hay, yo no la he notado porque incluso este año el Gobierno de Canarias nos ha quitado dos mil euros con respecto a la partida que nos dio en la edición de 2016. El éxito de esta iniciativa es fruto de la confianza que nos dan los patrocinadores privados", agradeció en el tramo final de una conversación que no termina sin una apreciación personal. "Esta es una programación de altura, pero tengo la sensación de que el concierto del verano será el de Carlos Vives. Es un espectáculo de primer nivel mundial", avisa.

Vea aquí el videoclip del tema "La bicicleta" que interpretan Carlos Vives y Shakira.