Tom Holland, el que fuera niño protagonista de "Lo imposible", regresa a lo grande a la cartelera con la tercera encarnación cinematográfica de Spiderman, de vuelta al instituto tras la representación caricaturesca de Tobey Maguire y el tono más dramático que ofreció posteriormente Andrew Garfield.

"Eran muy diferentes y no podría decir cuál de las dos me gustó más, pero creo que mi Spiderman está en un punto intermedio entre ambos", ha dicho el joven actor en su visita a Madrid para presentar esta producción junto a su compañera de reparto, Zendaya.

Será el 28 de julio cuando la cartelera española estrene "Spider-Man: Homecoming", primera parte de una nueva trilogía fílmica del personaje creado por Stan Lee y Steve Ditko en 1962, esta vez a cargo del director Jon Watts ("Coche policial", 2015).

Retoma el testigo de la primera trilogía, con Maguire como protagonista y realizada por Sam Raimi, y de las dos siguientes películas, esta vez con Garfield como el héroe de las telarañas y Marc Webb tras las cámaras.

"Me lo pasé realmente bien con la segunda parte de Tobey (''Spider-Man 2'', 2004) y creo que es la mejor. También disfruté la primera de Andrew (''The amazing Spider-Man'', 2012). Todo eso no ha hecho sino aumentar la presión cuando tuve que asumir yo el personaje", cuenta Holland.

Británico de 21 años, será la segunda vez que interprete al personaje tras su participación en "Capitán América: Guerra Civil" (2016), gracias a un acuerdo entre Sony Pictures y Marvel Studios que ha permitido reintegrar al ''alter ego'' de Peter Parker en el mismo universo de Los Vengadores, tal y como sucede en las historietas.

Su "Spider-Man: Homecoming" incorpora así a Robert Downey Jr. en el papel de Iron Man, mientras que Michael Keaton, tras "Batman" y "Birdman", vuelve a colgarse unas alas para interpretar esta vez al villano, el Buitre.

"Fue complicado (estar a la altura de ambos), porque son pesos pesados, pero nos lo hemos pasado muy bien durante el rodaje, colaborando los unos con los otros. Robert es una persona muy divertida a la que le encanta improvisar, mientras que con Michael todo era más intenso", recuerda.

El que encarnara a Billy Elliot en la versión musical británica de la conocida película del mismo nombre ha tenido que someterse a una rutina física intensa para interpretar a Spiderman, pero nada tan duro como el filme con el que se dio a conocer.

"''Lo imposible'' es la película más dura que he hecho nunca, no solo por los implacables rodajes, también por el tema del que se trataba. Fue algo que afectó a cientos de miles de personas, así que teníamos el compromiso de ser muy puntillosos. El de Spiderman ha sido un rodaje duro en el aspecto físico, pero no tanto, y he tenido a un increíble equipo cuidando de mí", afirma.

Después de Kirsten Dunst (Mary Jane Watson) y Emma Stone (Gwen Stacy), el contrapunto femenino lo pone la actriz Zendaya, quien encarna a Michelle, un personaje que, a diferencia de aquellos, no tiene traslación a las páginas del cómic.

"Para mí es una ventaja que no haya tanta literatura detrás. Tengo la libertad para experimentar, así que a partir de unas pocas premisas tuvimos que decidir cómo caminaba, cómo hablaba y cómo interactuaba Michelle", explica esta intérprete surgida de la factoría Disney.

Se trata de una chica aparentemente "solitaria, muy lista, franca y fuerte, también algo rara", cuenta sobre su avatar, que destaca frente a otros personajes femeninos de este tipo de productos de acción en que "no es la novia del héroe y no necesita ser salvada".

Según las informaciones apuntadas por Marvel Studios, será en 2019 cuando llegue a la gran pantalla la segunda parte de este nuevo Peter Parker que tiene muy claro contra qué villanos querría enfrentarse en próximas aventuras.

"Me gusta mucho el personaje de Misterio, aunque no es muy conocido por las masas. También me gustaría que apareciera el Doctor Octopus o Moebius y creo que con Kraven podría hacerse algo estupendo", dice, haciendo gala de un gran conocimiento de "tu amigo y vecino Spiderman".