Hace ya una década que la excelente colección de obras reunidas por el prestigioso crítico de arte tinerfeño Eduardo Westerdahl (EW) volvió a ser pública, tras permanecer cuarenta años en la oscuridad de un depósito.

La Casa de la Aduana del Puerto de la Cruz, cedida por el Cabildo de Tenerife, ha sido desde entonces la casa de acogida "provisional" del Museo de Arte Contemporáneo Eduardo Westerdhal (MACEW), que posee una colección de ciento cincuenta obras, sesenta y tres de las cuales fueron donadas por el intelectual tinerfeño. El resto han sido cedidas por diferentes artistas y particulares hasta la actualidad.

Con motivo de este aniversario, el MACEW ha organizado, junto al Instituto de Estudios Hispánicos de Canarias (IECH), una exposición bibliográfica con parte de los fondos de dicho organismo, cuarenta libros, que se inaugura hoy, a las 12:30 horas, con la actuación del trío formado por Julia de León (voz), Ignacio González (guitarra) y Guillermo Pérez (armónico).

"Te puedes encontrar con libros del propio EW, como por ejemplo Poemas de sol lleno, o libros escritos por el propio EW sobre artistas como Ángel Ferrant, Luc Peire y Will Faber. También hay ejemplares, todos ellos primeras ediciones, de Pedro García Cabrera, como Transparencias fugadas, o Enigma del invitado, de Emeterio Gutiérrez Albelo; Crimen, de Agustín Espinosa, o Signos de arte y literatura, de Ramón Feria. La verdad es que son verdaderas joyas", matizó Celestino Hernández, director del MACEW.

El vínculo de estos ejemplares con el museo es que "son libros cuyas portadas han sido realizadas por Pedro de Guezala, o por uno de los grandes de la colección del museo, como es Juan Ismael, entre otros. La selección se ha hecho extrayendo de los fondos depositados en el IEHC, básicamente, por el ilustrador Sebastián Padrón Acosta, sacerdote e historiador del Puerto de la Cruz. Son obras que en su momento fueron vanguardistas y tienen que ver en varios casos con el trabajo artístico del propio Westerdahl".

El MACEW ha cumplido ya una década en el espacio que prestó amablemente el Cabildo de Tenerife para exponer su valioso patrimonio plástico, que cuenta con obras de Domínguez, Fleitas, Szmull, Escobio, Massieu, Monzón o González. También nacionales como Úrculo, Lindell o Ferrant; y extranjeros como Stubbing, Paalen o Gulde, entre otros muchos.

Hernández, que se siente muy agradecido al Cabildo de Tenerife por la cesión de la Casa de la Aduana, sueña con instalar la colección completa en el ansiado espacio cultural Parque San Francisco. "Estamos en una sede provisional que no es la adecuada para la colección que alberga".

Celestino Hernández

director del museo eduardo westerdhal