Con honda pasión, la intérprete y compositora Davinia Gloria (Las Palmas, 1981) vuelve decidida a retomar los escenarios, dispuesta a ponerle voz a un enorme caudal de sentimientos.

La música representa su esencia, "volver a lo que realmente me mueve... Recuperar mi sueño", dice, porque le queda "Mucho por cantar", tal es el título de la gira que presentó el 20 de mayo en el CICCA, de la ciudad de Las Palmas, y que contiene, entre otros, "Prefiero morir", que se completa con la frase "esta noche entre tus brazos que vivir una vida entera sin amor".

"Es una canción de despecho, por desamor, en clave pop, pero con toques de ranchera", explica. En este caso tiró por ese camino, de la misma manera que interpreta un ritmo de charlestón en el tema "Me gusta creer en mí" o aires de rock con "Músculos de trapo".

Este jueves, desde las 19:30 horas y en El Ático del NH, ofrecerá un puñado de temas, acompañada por piano, percusión y una sorpresa final con trompeta, "en clave íntima".

Lo cierto es que Davinia considera que las canciones van tomado su "propio camino" y, en función de lo que se pretenda transmitir, "los estilos ayudan".

Con 4 años se subió con sus hermanas gemelas a un escenario "y me sirvió de mucho". Tras ser madre llega a esta cita con un punto de madurez, de profunda reflexión. "Este tiempo, después de la llegada de mis dos hijos, me ha valido para darme cuenta de quién soy y lo que deseo hacer". Un compromiso que, en lo personal, también traslada a sus hijos "para hacerles ver que hay que intentar perseguir lo que verdaderamente te gusta".

Esta artista reivindica la música en directo, sin desmerecer las versiones, por lo que supone de verdadera "identidad del artista, desde la interpretación y el espectáculo propio, entregándole al público algo nuevo.

Y lo nuevo viene de la mano de la cercanía, la complicidad y "la fuerza del directo", precisa, con temas extraídos de sus trabajos anteriores ("Derecho a soñar" (2000), "Se cumple un sueño" (2001) y "Te regalo" (2005) y otros inéditos, que incluyen partes de piano y voz, que valora por lo que supone en cuanto a tocar la fibra más íntima del público.

De un tiempo a esta parte, también ha decidido establecer una fusión, un vínculo entre dos artes: música y moda. "Juan Carlos Armas me ha cedido en algunos momentos sus modelos.", algo que le impacta, "porque se trata de vestidos de alta costura que no acostumbro a lucir en mis conciertos. Me siento vestida, arropada", igual que le sucede con el público canario, que siempre se ha mostrado cercano. Y aprovecha para reivindicar "la apuesta por el talento isleño".