El público que anoche se dio una vuelta por el Auditorio de Tenerife, algo menos del que suele acudir habitualmente a la gala final del Festival Internacional de Música de Cine de Tenerife, acabó en pie y aplaudiendo la versión que hizo Cristina Ramos de un tema de la película "La rebelión de las máquinas". Sí. Hubo muchas butacas vacías, pero ese instante en el que Diego Navarro puso a la Orquesta Sinfónica de Tenerife (OST) en clave de AC/DC fue histórico, igual que el magnífico concierto que organizó el compositor y director de orquesta santacrucero alrededor de "Galería nocturna de Stephen King". Lo de si tuvo más o menos magia que otras clausuras es algo que se puede debatir, pero el callejero musical que trazó Fimucité 2017 en su adiós hasta el año que viene estuvo inundado de técnica.

Es verdad que muchos espectadores tardaron en manifestar su júbilo -un hecho que coincidió con la aparición en el escenario de Fran León para cantar el "Stand by me" que adornó los créditos musicales del filme "Cuenta conmigo-, pero la obra de ingeniería que completó Navarro en torno a las partituras que provocaron el desembarco de Stephen King en la gran pantalla es abrumadora. Una voz en off y los fríos caracteres de una máquina de escribir ocupando el fondo del escenario, y de la que salieron unas frases tan certeras como la puntería de un francotirador, introducía los títulos que crearon una atmósfera para no irse tranquilo a la cama. La velada, terroríficamente hermosa, no acabó sin rendir un homenaje a título póstumo a Daniel Licht, compositor fallecido hace dos meses.