La poseía tiene esa facultad única de conmover, también de interrogar y de cuestionarlo todo. Ayer, en la sede de Presidencia del Gobierno, el Gobierno de Canarias celebraba un acto que, sobre todo, rescataba del olvido del tiempo la figura de Pino Ojeda (El Palmar de Teror, 1916 - Las Palmas de Gran Canaria, 2002), una brillante creadora que aún hoy continúa siendo una gran desconocida.
Con la voz quebrada, Isaac Castellano, consejero de Cultura, Turismo y Deportes del Gobierno de Canarias, recordó al intelectual Juan Hidalgo, fallecido este lunes, a quien definió como "un torrente de creatividad" y sobre quien dijo que "nos abandona la persona, pero nos queda la obra", y lo emparentó con la figura de Pino Ojeda, por cuanto ambos "supieron señalar el camino", dijo.
De la homenajeada en el Día de las Letras Canarias destacó que "en un contexto marcado por las dificultades de ser mujer desplegó todo su talento" y tampoco tuvo reparos para reconocer la deuda contraída hacia una relevante figura del mundo artístico, admitiendo que "estamos rescatando del cofre de los tesoros a toda una referencia de la literatura canaria" que ha quedado sepultada por el desdén y el paso del tiempo.
Castellano elogió a una persona "que no se limitó a estar presente en los momentos de cambio, sino que con su actitud y su implicación también los provocó". además de considerar que Pino Ojeda "puso los cimientos de la actual lucha por la igualdad de la mujer en la esfera social".
Con un nudo en la garganta, el nieto de la homenajeada, Domingo Doreste González, dirigió unas palabras al público cargadas de una evidente emotividad.
A su abuela la retrató como una mujer "soñadora, valiente y emprendedora" y tirando de memoria trajo del recuerdo una frase que, según explicó, siempre le repetía: "No renuncies a tu sueño".
Domingo Doreste afirmó que su abuela demostró un espíritu activista en la lucha por la libertad y los derechos de la mujer, un comportamiento que llevó hasta el plano personal, enfrentándose a su marido cuando este consideró que debía dedicarse a las tareas del hogar, a la atención del esposo y al cuidado de los hijos, como así establecía la norma de la época.
Lejos de eso, Pino Ojeda continuó desarrollando una prolífica y personal faceta creativa, desde la publicación de su primer poemario, "Niebla de sueño" (1947), hasta el espaldarazo que representó el accésit del premio Adonais de poesía de 1952 con su obra "Como el fruto en el árbol". En 1956 recibió el premio Tomás Morales por "La piedra sobre la colina" y en 1993, "El salmo del rocío" fue premio mundial de Poesía Mística.
En el plano pictórico expuso en EEUU, Suiza, Suecia, Alemania e Italia y mantuvo correspondencia con Juan Ramón Jiménez, Antonio Machado, Vicente Aleixandre, Pedro Salinas, Carmen Conde o Camilo José Cela, entre otros,
Pero buena parte de su obra permanece, de manera inexplicable, inédita. Por esta razón, la familia mantiene viva la ilusión de hacer realidad una fundación que aglutine su universo creativo.
El viceconsejero de Cultura, Aurelio González, recordó que entre los objetivos del Día de las Letras Canarias está el de"impulsar la pasión por la lectura a través de nuestro patrimonio literario" y destacó que "Canarias debe sentirse orgullosa de una trayectoria como la de Pino Ojeda", una personalidad de la que dijo "contribuyó a alcanzar la igualdad en todos los escenarios de la vida".
Durante el acto, un grupo de alumnos del IES Alcalde Bernabé Rodríguez de Santa Cruz de Tenerife recitó unos versos de Pino Ojeda, y se escenificaron sus poemas en forma de danza, mientras la cantante Carmen Agredano, con Ner Suárez a la guitarra, musicó un tema.
Isaac Castellano
consejero de cultura, turismo y deportes del gobierno de canarias
Domingo Doreste González
nieto de pino ojeda
Aurelio González
viceconsejero de cultura del gobierno de canarias