La soprano tinerfeña María Orán, Premio Larios por su labor musical, Medalla de Oro de la Isla de Tenerife y Cruz Oficial de Isabel la Católica, falleció la pasada madrugada a los 74 años de edad. La Fundación CajaCanarias le había rendido homenaje el pasado día 3 de marzo con un concierto en Tenerife en el que participaron Raquel Lojendio, Gustavo Peña, Juan Antonio Sanabria y Chiky Martín.

"Para cantar ópera hay que estar dedicada en cuerpo y alma. Prefiero emplear ese tiempo en enseñar, para lo que creo que tengo una gran intuición", señaló Orán en una entrevista que publicó El País en mayo de 1998, cuando ya llevaba casi una década dedicada a la enseñanza e ilusionada con "el gran nivel de algunas voces jóvenes".

“Tiene poses de diva, aunque sea todo lo contrario. Apoya sus puños en jarras sobre la cadera, alza su barbilla y en ocasiones su ceja derecha. Pero todo lo suaviza con permanentes sonrisas. La Orán hizo historia con el Francisco de Asís, de Messiaen, de quien, desde el estreno de la obra en París en 1983, pasó a ser una de sus favoritas”, resaltaba el autor de esta entrevista con una María Orán que, entonces, acababa de dar un giro definitivo a su carrera para concentrase en su definitiva apuesta por la enseñanza.

Comenzó sus estudios musicales en el conservatorio de Santa Cruz de Tenerife, su ciudad natal, transladándose posteriormente a Madrid, donde cursó clases de piano y de virtuosismo con el pianista José Cubiles y de manera simultánea canto con Lola Rodríguez Aragón, obteniendo en esta última especialidad el premio Fin de Carrera otorgado por el Real Conservatorio de Música de Madrid.

Ofreció recitales y conciertos por todo el mundo. Después de vivir 30 años a caballo entre Madrid y Friburgo (Alemania), Orán regresó a Tenerife, donde falleció este sábado, 10 de marzo de 2018.