El director insular de Cultura, José Luis Rivero, repasó las cifras del Festival de Danza Canarios Dentro y Fuera, que cumple su decimoséptima edición, y a vuela pluma se refirió a una cita que, en el lapso que va desde el día 26 hasta el 30 de diciembre, ofrecerá nada menos que 40 espectáculos y congregará a más de 70 artistas.

Se refirió a esta iniciativa como un punto de encuentro con una doble vertiente, "de un lado, para la ciudadanía con los artistas y, de otro, para los bailarines y bailarinas entre sí". A su juicio, "se trata de una cita imprescindible para la danza canaria", que calificó como "una de las manifestaciones artísticas que mejor nos representan", pero que paradójicamente es de las menos atendidas por las instituciones públicas.

Rivero destacó "el conocimiento, la creación y el talento que invadirán las calles de Santa Cruz esta Navidad" y como ciudadano agradeció que "esto suceda". Además, apostó por seguir sumando "para que así la danza ocupe el lugar que le corresponde".

El concejal de Cultura del Ayuntamiento de Santa Cruz, José Carlos Acha, subrayó lo que representa este festival, que consideró "imprescindible para saber y reconocer qué es lo que se hace en danza", y que sintetizó en "17 años de esfuerzo y pasión". Además de valorar su papel como espacio aglutinador "para que los canarios de dentro y fuera intercambien experiencias", también desveló, en clave sensible, que fue en los salones del teatro Victoria donde se despertó su amor hacia este arte escénico.

El bailarín y coreógrafo Roberto Torres, director del teatro Victoria y creador de esta cita, descubrió que nunca pudo llegar a pensar, siquiera imaginar, que iba a llegar tan lejos, "que fuera a trascender más allá".

De la iniciativa valoró que, en el contacto humano, "de repente surgen colaboraciones entre personas que, sin conocerse, descubren afinidades y establecen vínculos". Explicó que 40 espectáculos "son muchos", pero lo relacionó con "la pluralidad de manifestaciones que representa la danza" y se congratuló de que, junto a referentes como Daniel Abreu, Paula Quintana o Carmen Fumero, entre otros, el festival descubra a jóvenes talentos.

Desde ese diálogo dentro-fuera, Roberto Torres manifestó su inquietud por la cantidad de jóvenes que se están yendo y apostó por trabajar con ellos, en la idea de que "no sea imprescindible irse, emigrar". En este sentido, explicaba que muchos de los que ahora están lejos de las Islas le han manifestado su deseo de regresar. "Con 18 años te vas y ya con 30 dispones de un lugar maravilloso para volver". Se están generando condiciones para que así sea. Daniel Abreu, Premio Nacional de Danza y galardonado con tres reconocimientos en la última gala de los Max, actúa como un potente catalizador. "No me queda otra que ser optimista", concluyó.

José Luis Rivero

director inuslar de cultura

Reivindicando la calle y habitando espacios abiertos

"La danza habita en lugares abiertos y se transforma de acuerdo con cada espacio; está creativamente viva, no está cerrada y tiene la facultad de modificarse de un entorno a otro", dice Roberto Torres. "África es un lugar donde la danza forma parte de la vida cotidiana y Santa Cruz cuenta con bellos rincones y un tiempo maravilloso", subraya. "Hay personas que van en busca de los actos del Festival y otras que se los encuentran mientras transitan por la ciudad", subraya, para concluir afirmando que "una ciudad se hace porque suceden cosas".

La asignatura pendiente: un Conservatorio de Danza

"Tenerife cuenta con buenos e importantes festivales de danza. Existen centros de producción, como el caso del teatro Victoria o el Auditorio, y próximamente se abrirá el Centro Internacional de Danza en Garachico", destacó José Luis Rivero quien insistió en la idea de "hacer y pensar el movimiento", al tiempo que insistía en que "los canarios bailan distinto y es algo que se percibe". Como asignatura pendiente se refirió al sintagma para completar la frase: "nos falta la formación, un Conservatorio de Danza que marque los horizontes", con unos estudios de grado medio.

Numerosas academias: buena salud y vitalidad

"La Isla cuenta con numerosas academias de danza que vienen a sancionar la buena salud y la vitalidad de las múltiples manifestaciones que desarrolla este arte escénico", señalaba José Carlos Acha. "Es necesario un centro reglado en el que sea posible oficializar las enseñanzas, una infraestructura de carácter educativo y también formativo".