Como el cobre, el metal que conduce mejor la electricidad. Así fue Sandra Carrasco junto a la Big Band de Canarias. Ella condujo el flamenco en dirección a la Big Band y Kike Perdomo no perdió el rumbo en ningún momento. Fue una tarde mágica, la primera del 1 enero de 2019 y la quinta para el Concierto de Año Nuevo de Tenerife en Garachico. En torno a la música y disfrutando de ella estuvo el público. Como siempre fiel a la cita y entregado al duende que Carrasco regaló para abrir la primera tarde del año. El derrumbe que cortó el tráfico de la TF-42 ocurrido el 31 de diciembre entre Icod y Garachico no fue impedimento para los miles de personas que se acercaron y disfrutaron de la quinta edición del primer concierto del año.

El flamenco fue protagonista en un repertorio que mezcló también boleros, con la música cubana de Fernando Murga y las voces del coro Ghospel Shine Voices. "Flor de liz", "Qué será" o "Envidia" fueron algunas de las canciones que sonaron en la quinta edición del Concierto de Año Nuevo de Tenerife y que embelesaron a un público que un año más llenó la glorieta de San Francisco.