El recién finalizado 2018 representó un año florido para Tenerife Espacio de las Artes (TEA), el que clausuraba una década prodigiosa.

Con el propósito de hacer balance, el presidente del Cabildo, Carlos Alonso, en compañía del director insular de Cultura, José Luis Rivero, y el director artístico, Gilberto González, comparecía ayer en rueda de prensa para ofrecer detalles sobre las actividades realizadas y el proyecto de este centro de arte contemporáneo.

Alonso habló de la necesidad de "repensar y actuar de manera distinta en cuanto a la educación en valores y la creatividad" y subrayó que eso es, precisamente, lo que propone Tenerife 2030 a través del TEA, "una herramienta básica en esta estrategia".

Y puso el acento en diferentes hitos del año 2018, tales como el Espacio MiniTEA; las jornadas de Encarte o la proyección del centro al conjunto de la Isla, con la apertura en La Laguna de un espacio como el del Monasterio de las Catalinas -que se suma a los de Garachico, San Miguel y Candelaria- con un incremento importante del número de visitas en apenas dos meses.

También se refirió al "notable esfuerzo" desarrollado tras los duros tiempos de crisis, destacando la adquisición de colecciones como la Eduardo Westerdhal o la Ordóñez Falcón de fotografía, que representan "una pieza esencial para las propuestas de intercambio con otros centros de arte", precisó.

Asimismo, Alonso valoró el hecho de que los fondos del TEA, más de dos mil obras, se puedan ya consultar a través de la web de este centro de arte. "Somos el único de Canarias que ha colocado su colección en la web", un ejercicio de transparencia y una herramienta disponible solo en trece de los sesenta centros de arte contemporáneos consultados, lo que sitúa al TEA como referente en España y pionero en Canarias.

Por su parte, José Luis Rivero tiró de memoria y esbozó sus ideas. "La palabra museo se queda corta para un centro de arte que propone, se abre al debate y a la reflexión sobre la sociedad contemporánea y sobre lo que en ella acontece, a través de las artes visuales".

Y también se refirió al TEA como un espacio abierto a la convocatoria pública, desde el desarrollo de residencias artísticas, las ayudas al sector audiovisual y el fomento del pensamiento crítico.

Tras repasar números y porcentajes, Rivero se refirió a MiniTEA, "núcleo central y eje vertebrador; y no es una guardería, sino un centro de trabajo", recalcó.

Por último, felicitó al equipo de hombres y mujeres del TEA, sobre quienes destacó su "impulso, ganas y el cariño", señalando la figura del director artístico.

El ideario de Gilberto González está contenido en su proyecto, "Principio de incertidumbre", que en líneas generales propone un fortalecimiento de la doble vertiente institucional de museo y centro de arte. "TEA debe participar activamente como foro que redefina los procesos culturales y debe acompañar a la ciudadanía en la interpretación de aquello que acontece, en lo inmediato", explicaba, dejando claro que hay que entenderlo "no como un espacio para el ocio, sino para conocer a la sociedad".

Y manifestó que, más allá de interpretaciones, considera importante "el número de personas que acuden al centro".

Con el propósito de "sumar" dio a conocer novedades, como la implantación del Videoclub, donde se proyectarán diferentes ciclos de películas relacionadas con el arte; mantener viva una cita bianual como Fotonoviembre, mientras Área 60 tomará un nuevo enfoque, y el espacio MiniTEA seguirá programando diferentes exposiciones y actividades en torno a un tema central.

Carlos

Alonso

PRESIDENTE DEL CABILDO

DE TENERIFE

José Luis Rivero

DIRECTOR INSULAR DE CULTURA

Gilberto González

DIRECTOR ARTíSTICO DEL TEA