En su última visita al teatro Guimerá -el lunes se cumplirá un año- ya dio síntomas de fragilidad. Su voz no tuvo la potencia de anteriores citas, pero aún era reconocible, y el argentino optó por su clásico "luto" artístico para reclamar que seguía siendo un superviviente de los escenarios. Alberto Cortez (La Pampa, 11 de marzo de 1940 - Madrid, 4 de abril 2019) permaneció sentado en un taburete buena parte del concierto. "El regreso" se convirtió en la despedida de un artista único que murió ayer en el Hospital Universitario HM Puerta del Sur a los 79 años. El azar es así de caprichoso. Horas después de despedir a Rafael Sánchez Ferlosio, la noticia del adiós del cantautor y escritor originario de Rancul se regó a través de las redes sociales. El arranque del cuarto mes del año le está haciendo un roto al mundo de la cultura.

El Día entrevistó a Cortez horas antes de pisar por última vez una madera cuyo primer contacto se perdió con el paso de los años. "Me queda una vaga reminiscencia de aquel estreno pero, sinceramente, hace ya tantos años que tendría que realizar un ejercicio memorístico muy generoso para acordarme", admitió un creador que acumuló más de seis décadas de vivencias artísticas. "Uno intenta avanzar a través del tiempo tratando de encontrar las veredas más adecuadas para una caminata", indicó un congestionado José Alberto García Gallo, más conocido como Alberto Cortez. "Unas cuantas gárgaras de limón y mañana no tendré problemas", acertó a decir mientras en su cabeza ya le daba vueltas a un repertorio en el que no faltaron unos títulos imprescindibles como A partir de mañana, Castillos en el aire, Cuando un amigo se va, El Abuelo, En un rincón del alma, Te llegará una hora... Y es que, a pesar de su debilitada salud, los testigos de su última velada profesional en Tenerife salieron satisfechos con el menú que preparó para su vuelta al Festival Mar Abierto: ArteValle Producciones se convirtió en la plataforma desde la que impulsó sus giras más recientes por Canarias. "En las Islas me siento querido. Por esa razón tan sencilla pongo el corazón cada vez que vengo", agradeció el ''gaucho'' que cantaba cosas simples.

Amigo personal de Facundo Fierro, sus orígenes musicales datan de 1957. "Nunca me sentí maltratado por mi voz", explicó a este periódico en un intervalo de la entrevista en el que su potencia sonora cobra todo el protagonismo. "Ella ha sido una aliada que encontré en el camino, la compañera leal que me ayudó a no pisar sobre las piedras equivocadas".

Cortez, incluso, no se achantó en el momento en el que la charla adquirió unos tintes existencialistas. "No le puedo asegurar que esta vaya a ser mi último concierto en la Isla... Es muy posible que haya algo de eso", incidió un intérprete que no ocultó su miedo a desaparecer. "No duele, pero sí asusta", remarcó un ser que declaró durante la última entrevista concedida a El Día que vivir una sensación especial cada vez que se encontraba frente a frente con los espectadores: "Sentirme un superviviente de los escenarios es algo más que un titular de un periódico".

Solista con alma de inmigrante, a los 20 años decidió meterse en un barco que le llevó a Génova. En Italia agotó una primera etapa profesional, pero posteriormente se mudó a Amberes (Bélgica). "La vida es una aventura. Si no lo pruebas, nunca sabrás si valió la pena".

Estela Raval, Ricardo Arjona, Mercedes Sosa, Joan Manuel Serrat o María Dolores Praderas, entre otros nombres de enorme calado internacional, compartieron créditos con él en algún material discográfico. La poesía de Miguel Hernández y Antonio Machado, además, estuvo en el itinerario habitual de una voz que contaba con una exquisita belleza musical "cosas simples" que le sucedían habitualmente a las personas que escuchaban sus discos o acudían a ver en vivo sus audiciones. "Yo propongo una canción, luego la pasan media docena de veces por una emisora de radio y a partir de ahí son otros los que deben juzgarme. Unos se quedarán con ella y otros dirán: ¿qué está diciendo este hombre? La cultura debe moverse con libertad", sostuvo antes de que "El regreso" se difuminara para siempre entre el patio de butacas y las balconadas de un Guimerá que despidió emocionado a Alberto Cortez.

61 años en activo es el legado artístico que nos deja uno de creadores más importantes del siglo XX.

46 álbumes oficiales conforman la discografía de un cantante que cultivó géneros como la balada, el borelo o la trova cubana.

4 libros y dos películas también se incluyen en la faceta menos copiosa de un artista admirado en todo el mundo.

LAS CIFRAS

Escuche aquí el tema "Castillos en el aire" que interpreta el cantante de Rancul (Argentina).