Marcos Ledesma regresó para ganar y así lo hizo. El puntal A del Rosario de Valle de Guerra se alzó con el Campeonato Mundial de lucha Ssireum para extranjeros en Seúl -Corea del Sur-. En la gran final, el mayor de los Ledesma tuvo que emplearse a fondo para no quedarse con la miel en los labios, como padeció en la edición de 2014 cuando quedó subcampeón por detrás del grancanario Álvaro Déniz. En esta ocasión, el lagunero se puso por delante en la primera acometida frente al luchador de Mongolia que le porfió el entorchado. Sin embargo, su contrincante consiguió empatar y poner en cuestión el triunfo final. A Marcos Ledesma le tocó sacar a relucir todo su arsenal para hacer claudicar a su rival y hacer historia, como antes la habían hecho el propio Déniz o el también tinerfeño, del Llano del Moro, Fabián Rocha.

Para plantarse en la lucha definitiva, Marcos tuvo que deshacerse de dos compañeros de expedición, ya que los canarios fueron colocados por la misma parte del cuadro -evitar una final regional como la de la pasada edición parecía el objetivo de la organización de la Federación Coreana-. Primero, el puntal A tinerfeño venció al güimarero Rocha. Más tarde le tocó batirse con su hermano Eusebio Ledesma -había superado a su compañero de equipo, en el Tijarafe Guanche, Alejandro Afonso, en un duelo de debutantes en el Campeonato-. La experiencia de Marcos resultó determinante a la hora de imponerse a su hermano pequeño. Un enfrentamiento que en algunas semanas se volverá a repetir en la arena de un terrero.