No hay vuelta atrás. El Acuasport Tenerife Echeyde vive uno de los momentos más dulces de su historia al haber registrado esta temporada uno de los mejores inicios de los últimos cinco años, en el que solo han cedido tres puntos de los treinta y tres posibles. El pasado sábado consumaron la décima victoria a costa del Sant Feliu, recién descendido de División de Honor. Con este triunfo ante el cuadro catalán (cuarto clasificado), los canarios no solo se consolidaron una semana más como líderes en solitario, sino que además certificaron el Campeonato de invierno, un reconocimiento más bien anecdótico, pero que sirve como muestra del buen hacer que los tinerfeños han realizado en Primera División hasta hoy día, cuando ya nadie duda de su claro papel de favorito a conseguir el ascenso a la máxima categoría del waterpolo español, gran reto para los canarios, los cuales ya consiguieron el ascenso en la temporada 2011/2012.

En esa ocasión, el equipo presidido por David Rivas se vio obligado a renunciar a la categoría debido al "poco respaldo económico de las instituciones públicas". Lejos de caer en la desidia de resultados y clasificaciones irregulares, la familia del Echeyde -que es lo que son en la realidad- ha luchado año tras año por alcanzar el éxito. Para muestra, un botón. En las últimas cinco campañas, el cuadro insular ha sido segundo clasificado, quedándose a las puertas del ascenso por medio de la promoción, que viene a ser una fase en la que disputan una eliminatoria de ida y vuelta con el penúltimo clasificado de División de Honor. Lo habitual es que el vencedor sea este último debido a la clara diferencia en cuanto a ritmo de competición y presupuesto entre ambas categorías. Y eso es lo que ha venido pasando.

Aunque han rozado el ascenso con la yema de los dedos en reiteradas ocasiones, la plantilla al completo tiene claro que este año sí que sí. "No tenemos otra cosa en la cabeza que no sea el ascenso", reconoce Adrián Abad, una de las incorporaciones del Echeyde esta temporada junto a la de Esteban Gómez, Alberto Pavón e Ignacio Gutiérrez. Estos cuatro jugadores, sumados a la columna vertebral ya consolidada, está siendo el gran revulsivo de la categoría. Más allá del liderato, los tinerfeños son el equipo más anotador de la Liga, con la 147 goles, 33 más que Granollers (segundo) y Caballa (tercero), así como 38 más que La Latina, cuarto en este ranquin. Además, Eridú Alcalá sigue al frente de la lista de máximo goleadores, con 34 goles en 11 partidos. Unos números que demuestran el gran nivel del deportista de Usera. "Para mí todo lo que sea aportar para el equipo y ayudar a conseguir el ascenso lo veo positivo. Estamos muy contentos con esta primera vuelta", explica a EL DÍA.

Por el momento, pocos son los equipos que han mantenido el ritmo impuesto por los santacruceros. En particular, el Sevilla de Jesús Ordóñez "Tano" está siendo el único que se mantiene al acecho a la espera de un pinchazo del Echeyde. Los hispalenses son segundos a cinco puntos de los pupilos de Juan Pablo Sánchez, que cuenta con un partido más. El Sevilla-Horta de ésta última jornada se disputará el próximo 15 de este mes. "Viendo a clasificación el Sevilla es nuestro gran rival. La diferencia en cuanto a puntos entre ambos es mínima por lo que no podemos fallar en ningún momento", explica Sánchez el cual recuerda que en un mes (11 de febrero) su equipo deberá de afrontar uno de los compromisos más importantes de la temporada, el que le enfrente con el cuadro sevillano en Hytasa. Si se llega al partido con esta diferencia de puntos, al Echeyde le bastaría con un empate, pero el equipo quiere mucho más. "Queremos ir a Sevilla y ganar para así lograr una mayor tranquilidad", puntualiza Esteban Gómez. En el partido de ida celebrado en Tenerife, los canarios sufrieron pero se impusieron por 10-7. Antes de ese transcendental duelo, el Echeyde se verá primero las caras con el Concepción Lineal (este sábado) y con el Tres Cantos en Madrid (el 4 de febrero).

Tenerife busca de nuevo la élite

El ascenso del Echeyde en caso de materializarse sería no solo un hecho histórico para el club, sino también para toda la Isla, que ya en su momento vivió en primera persona grandes hitos tinerfeños en esta disciplina deportiva por medio del CN Martiánez, ahora en una delicada situación debido al cierre de la piscina municipal del Puerto de la Cruz. Tenerife fue en su momento epicentro del waterpolo nacional e internacional, acogiendo en la ciudad turística diferentes competiciones de gran relevancia tal como la Copa del Rey o alguna que otra fase de Copa LEN. Y es que el Echeyde puede recuperar el amor por el waterpolo de esta Isla. Está en sus manos que regresen los mejores equipos del país como inyección anímica para la promoción deportiva de este deporte. Que así sea.