El anexo al acta del partido de la Copa Heliodoro del pasado martes entre el Tenerife C y el Ibarra, disputado en la Ciudad Deportiva Javier Pérez y suspendido en el minuto 80 por el alto número de expulsiones que sufrió el conjunto sureño, refleja incluso amenazas de muerte por parte de jugadores visitantes, versión que no comparten en el club de Villa Isabel.

Hasta seis futbolistas vieron la tarjeta roja -por uno del Tenerife C- en las filas del Ibarra: Mendy, Toledo, Iray, Juan Ramón, Balduino y Carballo. Las cinco últimas coincidieron en el minuto 80 y vinieron acompañadas por comentarios intimidatorios hacia el asistente número dos del partido, Johan González, según refleja el árbitro Matías Wutke en la segunda parte del acta. "¡A mí ya me da igual todo esto porque me voy a retirar!, ¡a este tío lo mato!" o "¡te juro por dios que voy a buscar dónde vives y te voy a matar! ¡como si tengo que coger un avión e ir a El Hierro a buscarte!", escuchó, supuestamente, el citado asistente en los momentos de mayor tensión en la voz de Toledo e Iray. Son algunos ejemplos del relato de las incidencias que forman parte de un informe que también hace alusión al entrenador del Ibarra, Patricio de Ara, quien fue expulsado en el minuto 25 e igualmente se dirigió a los jueces del partido. El técnico reconoció ayer, en Radio El Día, que llamó "sinvergüenza" al árbitro, pero negó otra de las acusaciones que redactó el colegiado. "¡Estos vienen borrachos a arbitrar, hombre!" fue la frase añadida en el acta que De Ara aseguró no pronunciar.

"Estamos totalmente en desacuerdo", declaró refiriéndose a todo el contenido del acta. De hecho, contó que el nerviosismo de sus futbolistas estuvo provocado por la actitud del asistente número dos, Johan González. "Sin justificar los insultos, hay veces en las que no se puede actuar de esa forma. No puedes tener una autoridad y utilizarla para mofarte", lamentó Patricio sobre la manera de proceder "durante todo el partido" del árbitro herreño. "A los jugadores les decía cosas como: te espero fuera, no me duras dos asaltos, eres un payasito... Y hay que estar ahí y vivir esa situación", concluyó.