Depender de sí mismo en un tramo final de competición es siempre una ventaja. Así llega el Iberostar Tenerife a los tres últimos encuentros de la primera vuelta de la Liga Endesa, los que van a decidir si se clasifica entre los ocho mejores y juega, otra vez, la fase final de la Copa del Rey, que este año será en Gran Canaria. En Málaga (2014) y en Vitoria (2017) fueron sus dos últimas presencias.

Con el Real Madrid (11 victorias y 1 derrota) ya clasificado y el Herbalife también, como organizador, quedan seis plazas, pero nadie se atreve a pronosticar cuántas victorias serán necesarias para lograr la clasificación. El Iberostar tiene la ventaja de estar "dentro", como sexto y con 8 triunfos. Además, juega dos partidos en el Santiago Martín, aunque serán ante dos rivales muy complicados, en especial el Baskonia. Parece más que probable que con dos victorias más, con 10, tenga un sitio entre los ocho mejores. Es muy improbable que Andorra, Obradoiro o Murcia -al menos dos de ellos- ganen sus tres partidos, o que Unicaja se apunte las cuatro victorias (tiene un partido pendiente que juega hoy ante el campeón de Liga, Valencia).

Con un solo triunfo más, o sea, con 9, se abren muchas más combinaciones. Una de ellas, la hipótesis de que haya que dilucidar la clasificación por average, si hay empate a victorias. En este aspecto, el Iberostar no tiene nada garantizado, a pesar de haber mejorado de manera sustancial su cociente con la ventaja que obtuvo ante el Herbalife, pero por ejemplo el Andorra tiene mejor average que los de Katsikaris.

Los resultados de esta tarde pueden dejar casi sin opciones a dos rivales teóricos, Unicaja y Guipúzcoa. Los malagueños reciben al Valencia, que quiere ser cabeza de serie y necesita para ello un triunfo más. Un triunfo de los de Vidorreta y una presumible victoria del Barcelona dejan al Iberostar mucho más cerca de la meta.

Plan semanal, desde hoy

La plantilla canarista disfrutó ayer de una jornada de descanso, tras la sesión de hidroterapia del domingo en el Hotel Mencey. El equipo se reincorpora hoy al trabajo esta tarde (18:00 horas) para luego entrenar mañana al mediodía. El jueves habrá doble sesión (10:30 y 18:00) y el viernes una última (12:00), antes de volar el sábado desde primera hora a Guipúzcoa. En San Sebastián entrenarán el sábado y la mañana del domingo. El encuentro ante el Delteco GBC será a las cinco de la tarde del domingo.

Tras la exhibición de juego del pasado sábado, el equipo ha recuperado el optimismo y solo está pendiente de poder disponer también de Mateusz Ponitka, que se irá probando durante la semana para decidir.