La rumana Simona Halep irrumpe en el torneo de Madrid ataviada de la condición de número uno del mundo y distinguida como campeona vigente, expectante por sumar un nuevo premio y convertirse en la primera jugadora en acumular en su historial tres trofeos en la Caja Mágica.

Nadie más que Simona Halep, la estadounidense Serena Williams y la checa Petra Kvitova han logrado ganar en dos ocasiones la competición madrileña. La rumana se apuntó las más recientes. La norteamericana fue la mejor en el 2012 y 2013 y la centroeuropea en el 2011 y el 2015.

La terna forma parte de los grandes reclamos del cuadro femenino de este año junto a tenistas como la danesa Caroline Wozniacki, segunda del mundo y finalista en el 2009, la ucraniana Elina Svitolina, la letona Jelena Ostapenko, la checa Karolina Pliskova, la francesa Caroline Garcia, las estadounidenses Venus Williams y Sloane Stephensla alemana Angelique Kerber o la bielorrusa, otrora número uno del mundo, Victoria Azarenka.

Halep aspira a ser la primera en triunfar en tres ediciones en Madrid, donde el público valora su espíritu, su pasión su tenis y su coraje. Nadie desde el 2015 ha ganado a la rumana en la Caja Mágica.

En cualquier caso, la gran expectativa del público madrileño es Garbiñe Muguruza. La tercera tenista del mundo jugará por séptima vez el Mutua Madrid Open, donde no ha fallado desde el 2012. Hasta ahora, nunca ha sido capaz de ganar dos partidos. Su techo está en los octavos de final que alcanzó en el 2013. En el pasado ejercicio perdió su primer encuentro, frente la suiza Timea Bacsinszky.

La ganadora de Roland Garros en el 2016 y la vigente reina de Wimbledon aspira en Madrid a inaugurar su cosecha de éxitos del presente ejercicio tras el intento fallido de Doha, donde fue finalista.

Madrid espera, además, el estado de Serena Williams. Exnúmero uno, dominadora de cada competición no hace mucho, está de vuelta a las pistas después de trece meses de ausencia por su maternidad. Serena, que volvió a la competición oficial en febrero pasado, con el equipo de Copa Federación de Estados Unidos, tiene incluido el Mutua Madrid Open en su selecta lista de torneos en la temporada.

La ganadora de veintitrés títulos de Grand Slam, uno menos solo que la legendaria Margaret Court, solo ha formado parte del cuadro de dos torneos. En Indian Wells, donde cayó en la tercera ronda ante su hermana Venus. Y en Miami, donde perdió ante la japonesa Naomi Osaka en el primer partido. Madrid, Roma y Roland Garros son sus desafíos en tierra.

La rusa Maria Sharapova también estará en Madrid, donde ganó en el 2014. La siberiana no ha vuelto a ser la misma después de su vuelta tras la sanción por dopaje. Pretende regresar a la elite del circuito Sharapova que tiene como techo en el 2018 las semifinales del torneo de Shenzhen y la tercera ronda del Abierto de Australia. En el resto, como Doha, Indian Wells, Stuttgart, la rusa no ha sido capaz de superar las rondas iniciales.

La décima edición del torneo femenino del evento madrileño, del calibre Premier Mandatory, apunta un puñado de grandes aspirantes y a Halep como rival a batir. Al contrario de lo que sucede en la competición masculina, con Rafael Nadal como gran dominador en esta superficie, el éxito está abierto para antiguas campeonas que vuelven al evento y candidatas que en alguna ocasión estuvieron en la cima del circuito.

Es el reflejo de la carrera por el número uno del mundo, susceptible de variar y abierto para varias jugadoras desde que Serena se detuvo. Un lugar privilegiado por el que han alternado diferentes raquetas sin demasiado tiempo para hacer historia.

A tener en cuenta son tenistas como Caroline Wozniacki, que regresó al número uno mundial esta temporada cuando levantó su primer Grand Slam, en Australia, o Elina Svitolina, la jugadora con más títulos individuales en la presente temporada y en plena madurez.

Garbiñe Muguruza acapara la esperanza española donde busca un hueco Carla Suárez, que siempre cumple en Madrid. La tenista canaria aspira a un papel que premie su tenacidad y perseverancia.

Lara Arruabarrena o Sara Sorribes forman parte también de la representación local a la que se aferra el seguidor del torneo.