El Ramón de Carranza registrará el próximo domingo un lleno en sus gradas si no fallan los abonados, después de que se colgara el cartel de no hay billetes en el día de ayer. Después del tropiezo del pasado domingo ante el Barcelona B, el Cádiz decidió poner a la venta el aforo disponible a 10 euros por localidad. Ese primer día fue de venta exclusiva para socios, quedando para el público en general desde el pasado miércoles.

En apenas día y medio se agotó el papel, quedando comprobado que la petición de ayuda lanzada al aficionado cadista ha surtido el efecto deseado. Para el conjunto de Álvaro Cervera, el choque ante el Tenerife es una final. Una victoria supondría meter pie y medio en el "playoff" de ascenso, pero un tropiezo complicaría en demasía sus opciones. "La afición está enganchadísima y esto lo demuestra", ha dicho Cifuentes en rueda de prensa.

Para el portero del Cádiz, el equipo amarillo tiene "crédito" suficiente para que se crea en sus posibilidades de acabar entre los seis primeros y su condición de "equipo sólido" debe ayudarle a lograr el objetivo. "Dependemos de nosotros", señaló antes de mostrar su respeto hacia el Tenerife del que tiene claro que irá al Carranza "a ganar".

El aforo del estadio gaditano ronda los 20.000 espectadores y el Cádiz tiene unos 16.000 abonados, por lo que se han vendido 4.000 localidades gracias a la oferta especial puesta en marcha por el club andaluz.

Cervera tiene las dudas para la visita del Tenerife de Jon Ander Garrido y Salvi Sánchez, ambos lesionados, que siguen sin incorporarse al trabajo de grupo después de dos entrenamientos de la presente semana.