Un Herbalife Gran Canaria que se entregó al máximo y acabó ovacionado tras su gran temporada no pudo impedir la victoria del Real Madrid (92-99) en el tercer partido de las semifinales de Liga, en el que Rudy Fernández tuvo una actuación estelar para lograr el billete para la final por la vía rápida. El partido llegó al descanso con máxima igualdad (50-50), con un juego veloz y vibrante, y con dos equipos cuyos ataques se imponían claramente a las defensas. El tercer cuarto acabó decantando el duelo.