El Zaragoza desarma al Oviedo en el Carlos Tartiere

El Real Oviedo cayó goleado ante un gran Real Zaragoza (0-4) que no solo se mostró más acertado que su rival tanto en la presión como en el acierto de cara a puerta, sino que dio un recital de movimientos tácticos en encuentro un gris de los locales.

Ambos equipos empezaron probando suerte con tiros exteriores, pero pronto el Zaragoza se hizo notar en tres cuartos de campo y fue ganando metros como prueba de la exigencia defensiva que se le venía encima a los locales.

Los maños se adelantaron en el marcador cuando apenas se cumplía el cuarto de hora, y lo hicieron con un balón jugado a la espalda de la defensa en el que Álvaro Vázquez aprovechó la duda de Alfonso Herrero para cruzar un disparo que acaba con el balón en el fondo de la portería.

A partir de ese momento, el Oviedo lo intentó, pero al no tener dominado el medio del campo siguió sufriendo los envites de un Zaragoza bien plantado y que encontró en Marc Gual y en Pombo los hombres idóneos para hacer daño al combinado azul.

Una gran jugada de combinación de los visitantes acabó con Marc Gual en el área pequeña y a punto estuvo de suponer el segundo tanto si no lo evita un defensor del Real Oviedo, acción similar a la que ocurriría minutos después con idéntico protagonista, cuyo disparo desde fuera del área se fue fuera rozando el palo.

La única opción con peligro de los carbayones fue una jugada entre Berjón y Bárcenas en la que el ovetense asistió al internacional panameño en el área, pero ante la presión de la defensa maña, el tiro de Bárcenas se fue alto.

La segunda parte siguió un guión similar al de la primera pese a la entrada de Folch por Boateng, y, cuando aún no se llevaban diez minutos de reanudación, los zaragocistas ampliaron distancias en el marcador con una volea de Verdasca en un saque de esquina que pegó en el palo primero y entró en la portería de Alfonso después.

Mejor posicionados y más ordenados en la presión, los maños no concedieron una ocasión de peligro clara hasta el minuto 70, momento en que el mismo Folch, que entraba para dar aire en mediocampo, remató de cabeza un balón que se estrelló en el poste y por poco no acabó en gol.

La respuesta del Zaragoza fue contundente, y los hombres entrenados por Idiakez aún tuvieron tiempo de ampliar el marcador: primero en una contra en la que Pombo asistió a Igbekeme para que éste batiera a Alfonso, y luego Soro tras un disparo de Aguirre que despejó el guardameta de primeras y que empujó sin marca el zaragocista en segunda jugada al fondo de la portería.