La sede de la Copa del Mundo Femenina de Baloncesto contará desde hoy con la presencia de su anfitriona. La selección española aterrizará esta tarde, a las 16:50 horas en el aeropuerto de Los Rodeos -salvó incidencia-, de cara a aclimatarse y acometer el epílogo de la preparación para la cita, que acontecerá del 22 al 30 del presente mes de septiembre.

Después de disputar los dos últimos choques preliminares en Cáceres, el combinado entrenado por Lucas Mondelo afinará su puesta a punto en la Isla con dos enfrentamientos. Este sábado se mide a Japón, con el que ya jugó dos veces en el pasado mes de julio y contra el que debutará en el Mundial el sábado 22. Será en el capitalino Pabellón Municipal de Deportes Quico Cabrera, a partir de las 20:00 horas. Antes, a las 17:30 horas, se habrán enfrentado las selecciones de China y de Australia.

Un día después, en la jornada dominical, se repetirán los horarios de las contiendas, aunque se modificará el escenario: será el Pabellón de Deportes de Tenerife Santiago Martín. Haya ganado -pugnaría en la final- o perdido -porfiaría por el tercer puesto-, el partido de España en el recinto de Los Majuelos -La Laguna- será en el segundo turno -20:00 horas-.

El Santiago Martín será el escenario donde España se entrenará a partir de mañana, previsiblemente en dobles sesiones. Hoy no lo hará tras presentarse en la Isla y acomodarse en el que será su cuartel general en las próximas semanas: el La Laguna Gran Hotel de la Ciudad de Los Adelantados.

Los representantes de la selección fueron despedidos ayer en Madrid, en un acto en el que intervinieron Jorge Garbajosa, presidente de la Federación Española de Baloncesto -FEB-; Borja Prado, presidente de Endesa; y Mariano Soriano, director de deportes del Consejo Superior de Deportes.

"No es tanto una despedida, sino un gesto de cariño a una selección que nos ha dado tanto en los últimos años. Hemos alcanzado cotas que el baloncesto femenino no había conseguido nunca, junto al trabajo de mucha gente, incluidas estas chicas que han puesto el listón muy alto", dijo Garbajosa.

"Afrontamos un reto mayúsculo, con la suerte de vivir un Campeonato del Mundo en casa. Os merecéis el éxito deportivo por trabajo y esfuerzo, pero lo que ya habéis conseguido es habernos ilusionado a todos", añadió el presidente de la FEB.

Mientras, la capitana de la selección, Laia Palau, aseguró que más que presión el grupo siente "responsabilidad" de representar bien al deporte nacional. "Nosotras siempre jugamos presionadas porque cada año tenemos citas importantes y conseguimos cosas que no esperábamos conseguir. Más que presión prefiero pensar que será responsabilidad, que sentimos todas como buque insignia del deporte femenino", apuntó.

Las lesiones propician "un plan A y un plan B"

Laura Nicholls, Silvia Domínguez y Alba Torrens son las tres jugadoras españolas con pequeñas sendas lesiones. "Estamos trabajando con un plan A y un plan B, dependiendo de cómo acabe siendo el doce definitivo, porque ahora mismo no lo sabemos por dos razones: porque hay una competencia muy fuerte en algún puesto del equipo, y eso es bueno; y porque hay algunas jugadoras tocadas y hay que ver cómo evolucionan", declaró el seleccionador nacional español, Lucas Mondelo. "La preparación va bien, no por los resultados, sino por la puesta en escena del equipo, la intensidad y los terceros cuartos que estamos haciendo", subrayó el preparador.

El combinado femenino jugará en Tenerife 17 años después

La Isla tuvo que aguardar muchos años para ver "in situ" a la selección absoluta de féminas. El debut sucedió el 16 de agosto de 2001, en el Pabellón Miguel Ángel Díaz Molina del Puerto de la Cruz, emplazamiento que será una de las sedes de entrenamiento del inminente Mundial tinerfeño. España apabulló a Finlandia (83-44) y también dio cuenta de Lituania (81-76), dos días después, en la misma cancha. El equipo de Vicente Rodríguez "Cholas", cuya escala en Tenerife obedecía a la preparación del Eurobasket de Francia, tenía entre sus huestes a las tinerfeñas Nieves Anula y Lidia Mirchandani. Ambas se acabaron colgando el bronce en tierras galas.