Alba Torrens y Laura Nicholls descuentan del calendario los últimos días antes de comenzar la Copa del Mundo de Baloncesto Femenino en Tenerife, una isla de grandes recuerdos para la pívot y la alero españolas, quienes lograron en el mismo escenario convertirse en campeonas de Europa júnior.

El Pabellón Insular Santiago Martín, sede principal del campeonato mundial que comenzará el próximo fin de semana, acogió en el verano de 2006 un torneo en el que se dieron cita las grandes promesas del baloncesto femenino europeo.

La selección española hizo valer su condición de anfitriona y el apoyo de los aficionados tinerfeños para llegar a la final del campeonato, en la que lograron vencer contra pronóstico a la poderosa Serbia (78-74).

Formaron parte del quinteto inicial en la final Alba Torrens y Laura Nicholls, quienes fueron unas de las líderes del equipo durante todo el torneo y en el partido decisivo anotaron doce y cuatro puntos, respectivamente.

Con el partido igualado a 72 en los últimos instantes, Alba Torrens logró una canasta que dio ventaja al equipo español y, a la postre, resultó decisiva para amarrar la medalla de oro en el Santiago Martín, donde se dieron cita más de 3.500 espectadores.

Sin embargo, la gran protagonista de la final fue la ala-pívot Tamara Abalde (23 puntos), uno de los últimos descartes de Lucas Mondelo antes del comienzo de la cita mundialista.