La Real Federación Española de Béisbol y Sóftbol ha vuelto a practicar un nuevo giro de tuerca en su reglamentación con el objetivo de acabar haciendo del béisbol español un deporte profesional. La regularización de los deportistas en el país vuelve a ser el cambio más ostensible en la normativa de cara al curso 2019.

Si el año pasado se contemplaba en la reglamentación de la División de Honor de béisbol la prohibición de fichar a jugadores sin NIE y con visado de turismo, en la última reunión del ente federativo se decidió por ir un paso más allá. En la competición del 2019 todo jugador que ocupe ficha en alguno de los clubes que conforman la élite del béisbol en España, tiene que tener regularizada su situación en el país y, por tanto, poseer contrato de trabajo y/o tener certificado de residencia.

Muchos clubes, ante esta tesitura, están gestionando contratos laborales para sus jugadores, ya que así tendrían visa temporal en el país. El San Inazio (Bilbao) es el club que más problemas tiene, ya que buena parte de su roster disponía de NIE. Mientras, el Marlins tiene a toda su plantilla en regla para comenzar la pretemporada el próximo día 19.