La sociedad las necesita, también en los puestos de responsabilidad en profesiones que, por historia, han estado ocupadas por el género masculino. Con el paso de los años, y de manera muy paulatina, se han ido sumando las féminas al mundo del deporte, tanto en la práctica como -en menor medida- en los puestos de dirección y gestión. Atalía Barbuzano León (Valle de Guerra, 30/04/1995) es una joven que ha apostado por forjarse un futuro en la gestión, organización e, incluso, creación de grandes eventos deportivos. La lagunera ya ha estado en la plantilla de trabajadores de la Federación Española de Baloncesto, Copa del Mundo Femenina de Baloncesto 2018 y en el Mundial de Windsurf celebrado en El Médano.

"Siempre me ha gustado el deporte, pero nunca he sido especialmente talentosa en ninguno de ellos. No obstante, encontré la manera de encajar mi gusto y mis virtudes en una profesión, la de gestionar y organizar eventos deportivos", explica a EL DÍA.

Acerca de la experiencia más reciente que ha tenido, el Mundial femenino de baloncesto, asume que no la disfrutó. En la cita planetaria, Atalía ejerció como responsable de área en zonas VIP y patrocinadores. "Lo que fue la previa superó en carga de trabajo a los días de competición. No obstante, todo salió genial y hubo reconocimiento por parte de la FEB y FIBA", asevera.

Para la vallera, formada en la Universidad Europea de Madrid, ha sido un "privilegio" y un "sueño hecho realidad" el poder liderar y formar parte de grupos de trabajo en eventos y federaciones deportivas de primer nivel. Entre sus próximos objetivos se sitúa el "poder formar parte de la Copa del Mundo Femenina de fútbol".

En su reflexión le concede especial relevancia a la "colaboración", ya que para ella debe estar "por encima de la competitividad. Al fin y al cabo, si quieres ser competitivo estás obligado a colaborar y a dejarte ayudar", asegura Barbuzano. En esa misma vertiente de la exposición, apunta hacia el "necesario apoyo entre las mujeres. Si no nos apoyamos entre nosotras, no vamos a ningún lado".

En contrapartida a lo que les ha sucedido a muchas féminas en el intento de ocupar un puesto de responsabilidad en el deporte, Atalía revela que "hasta el momento" no se ha encontrado con "trabas" que hayan impedido su evolución o la puesta de largo de proyectos e iniciativas. "Muchos hombres quieren y están interesados en que haya más mujeres en los puestos de responsabilidad. Lo que buscamos es equilibrio e igualdad. Nunca en mis ideas y proyectos voy a excluir a un hombre por ser hombre, ni a una mujer por ser mujer. Tenemos mucho que aportarnos y es necesaria la presencia de ambos géneros en los espacios de coworking", reseña la joven.

Atalía Barbuzano no se pone metas y espera que no existan techos de cristal en el intento de innovar como gestora.

Atalía Barbuzano

GESTORA DE EVENTOS DEPORTIVOS

El trabajo fin de máster llevó a Atalía Barbuzano y a dos compañeras a presentar un proyecto en el cual ya centran sus intenciones de negocio futuras. Bajo la marca Women Experiencie Sports (WES) pretenden dar cobertura a un yacimiento de empleo hasta el momento poco explotado. Ofrecer experiencias y un contacto directo con los principales eventos y deportistas de referencia, su fundamento empresarial.

La venta de experiencias deportivas no es algo novedoso, ofertar experiencias deportivas como espectador, tampoco. Ahora bien, darle la posibilidad al espectador de conocer de primera mano los entresijos de los principales eventos deportivos y conocer a los deportistas que participan en la cita sí lo es.

Para Atalía, sería un "sueño" poder dedicarse "plenamente" a esta idea de negocio que aún "no pasa de ser una marca". Lo novedoso de la propuesta va más allá de lo que se oferta, ya que quien se encuentra detrás de WES son tres féminas.

"Ya hemos tenido clientes. Hace algunos meses llevamos a un grupo de personas a Wembley, allí se entrenaba la selección brasileña de fútbol, con la que tenemos un buen trato. Los clientes valoraron la experiencia de manera muy positiva. Pudimos ofrecerles charlas con los patrocinadores y contacto directo con los futbolistas. Fue muy enriquecedor", concluye.