Víctor Moreno confirmó ayer la información que EL DÍA aportaba la pasada semana: después de los cuatro primeros fichajes hay que parar. "El capítulo de altas está en stand-by porque nos interesa, ahora mismo, estar expectantes después de la primera remesa a las posibilidades que se irán abriendo en estas últimas semanas. Debemos tener un papel menos proactivo que en la primera quincena y centrarnos más en el capítulo de bajas", comentó, aprovechando la presentación de Uros Racic para repasar su actividad en el mercado de invierno.

Cuestionado sobre las posibilidades económicas del CD Tenerife para apostar por alguna incorporación de postín entre las que quedan por realizar, el director deportivo descartó una pelea económica con otros clubes. "La verdad es que nos gusta tener cierta firmeza en las negociaciones. No nos viciamos con ninguna operación. Si requieren de algún imprevisto o fuertes pujas económicas, lo más probable es que nos decantemos por otras opciones", aclaró.

Será difícil, por tanto, que el conjunto blanquiazul aspire a grandes nombres en el mercado de descartes. No obstante, es algo que no preocupa. "Seguiremos trabajando en la hoja de ruta, con la cual estamos contentos en este momento", insistió Moreno, que no quiere quedarse con el buen sabor de boca del partido ante el Nástic porque la planificación "no se basa en los resultados, sino en lo que hemos captado dentro del equipo en cuanto a virtudes, defectos y posibilidades de mercado". No obstante, sí está abierto a variaciones en función de las situaciones que se vayan dando durante estas semanas.

Uno de los casos que podría cambiar es el de Héctor Hernández, titular el pasado domingo y que rindió a la altura de un "notable, en la línea de todo el equipo". El responsable de fichajes del club insular reconoció que "la situación de Héctor podría ser diferente después de lo de ayer. Pero tenemos que barajar las diferentes opciones y ver qué piensa también el míster".

El ejemplo del lateral vallisoletano puede servir de espejo a otros casos en la plantilla. "Viendo la sesión de esta mañana (por ayer), he visto bien tanto a los que participaron como al resto. Se está incrementando el nivel de los entrenamientos. Los refuerzos nos van a dar un salto de calidad bastante grande. Para nosotros es fundamental que existan 20 jugadores con opciones de ser titulares", contó Moreno, quien quiso poner los pies sobre la tierra al afirmar que "hay que calibrar bien el triunfo" ante el Nástic, porque "un día estás arriba y otro abajo en el fútbol".

En cuanto al capítulo de bajas, descartó que las ausencias de Joao Rodríguez y Tyronne del Pino de la lista de convocados de José Luis Oltra se debieran a su condición de descartes. "Es una decisión deportiva. Son jugadores con escasa participación durante la primera vuelta, y son cosas que suceden cuando el número de integrantes de la plantilla aumenta. Es una situación desagradable, pero no se trata de provocar nada, sino que el míster debe pensar en ganar un partido", explicó.

Por último, la salida de Chilunda al Izarra la consideró "un movimiento interesante para que el jugador conozca más la competición nacional" y porque el club navarro fue "el más interesado" en hacerse con sus servicios.

Aitor, hasta 2020

El 5 de agosto de 2017 este periódico anunciaba la ampliación del contrato de Aitor Sanz hasta el 30 de junio de 2020. La maniobra, distinta a la de otros veteranos, fue escondida por el club al anunciar el acuerdo en un 2+1 que no era tal. Ayer, Víctor Moreno confirmó la duración del vínculo y que mantiene la idea de "recuperar al mejor Aitor Sanz, que representa la seriedad que queremos dar al proyecto y ya está aportando cosas desde fuera al equipo".

Víctor Moreno

DIRECTOR DEPORTIVO DEL CD TENERIFE