El elogio debilita. Esta concisa reflexión debió pasar por la cabeza de José Luis Oltra al ver el juego que estaba desplegando su Tenerife el pasado sábado ante el Córdoba. Cometieron sus futbolistas pecados impropios de un equipo que ha sufrido lo indecible durante la primera vuelta y que ahora, en cuanto han mejorado las sensaciones mínimamente, rebajó su listón de exigencia hasta zonas que pusieron en peligro su competitividad. Como resultado, una inesperada y dolorosa derrota que le da vida a un rival que estaba cerca de arrojar la toalla. Fue la primera victoria a domicilio del Córdoba en toda la temporada. Sintomático.

Intensidad y concentración. Ni de lejos fue el de anteriores comparecencias en estas facetas. Poco agresivo y excesivamente confiado, el conjunto blanquiazul volvió a perder duelos individuales y regaló en dos acciones a balón parado los goles encajados. Ni siquiera se le notó el paso adelante de ocasiones anteriores en las que se ha visto por debajo en casa.

Planteamiento y ejecución. Hablado estaba en los entrenamientos y la charla previa, pero los jugadores obviaron el plan de José Luis Oltra: cargar el juego ofensivo por los costados. Consciente como era de la aglomeración de futbolistas por dentro en el cuadro andaluz, el preparador valenciano se desgañitó, sin éxito, durante el choque: "Por fuera, por fuera".

Imprecisiones. Milla es mucho Milla. Ayer se le echó en falta. Futbolistas como Racic y Borja Lasso, intachables en tardes anteriores, estuvieron desconocidos. Erraron en el pase y en el criterio y, aunque se vaciaron en el apartado defensivo, no condujeron el juego ofensivo como se esperaba.

Caso Naranjo.Sigue sin rendir al nivel esperado y desaprovechó su enésima oportunidad como titular. Aún así, fue el que más disparó a portería de los insulares (dos veces). Para Oltra es un problema que empieza a enquistarse y un arma menos que usar.

El gol. El asunto no quedó resuelto en el mercado de invierno y ayer volvió a quedar de manifiesto. Por tercer partido consecutivo se quedó sin marcar el Tenerife. No solo eso, es la sexta vez que no ve portería en el Heliodoro en la presente temporada.