Txus Vidorreta, entrenador del Iberostar Tenerife, señaló ayer al combo Jaime Fernández como el termómetro del conjunto malagueño. "Cuando él está bien, el Unicaja brilla. Si está un poco peor, sufre un poco más", comentó.

En estas últimas semanas, el madrileño parece haber recuperado la versión que dio en el arranque liguero, antes de lesionarse su rodilla a mitad de noviembre. En los triunfos cajistas "in extremis" frente al Real Madrid y el Baxi Manresa, Fernández sumó 34 y 17 créditos de valoración, respectivamente, además de anotar la canasta definitiva en la prórroga ante el conjunto merengue.

Empero, el técnico del CB Canarias cuenta con su particular medidor. Este no es otro que Tim Abromaitis. El representativo insular no ha perdido ninguno de los siete encuentros de la actual Liga Endesa en las que el norteamericano ha aportado 15 créditos o más de valoración.

Los faros de sus respectivas escuadras se desenvuelven de manera distinta sobre la cancha. El internacional español lleva la manija del juego ofensivo de su equipo, siendo él mismo el que se fabrica la jugada para culminarla en muchas ocasiones. Mientras, el ala pívot suele ser un finalizador del juego colectivo atacante aurinegro, sobre todo, desde las esquinas, amén de las prestaciones defensivas que le aporta al técnico bilbaíno. Entre otros aspectos, es el canarista que más balones ha robado en esta campaña.

Tanto Fernández -segundo mejor jugador de la Liga Endesa, con un promedio de 16,5 créditos de valoración- como Abromaitis comparten el hecho de pertenecer al selecto grupo de los 10 jugadores que mejor más/menos tiene en la presente ACB. Dicha estadística mide para cada jugador el resultado obtenido por el equipo -puntos aportados, menos puntos encajados- cuando él ha estado en pista.

Cuando Tim ha sido de la partida, el Iberostar Tenerife ha sumado 130 puntos en la competición doméstica. Mientras, con Jaime en la cancha, el Unicaja de Málaga ha sumado 123 enteros. Como quiera que el capitalino ha disputado un partido menos que el de Waterbury -Connecticut-, ambos marchan con una media de 6,5 puntos en cuanto al más/menos se refiere.

En el vestuario aurinegro saben que frenar a Jaime, tal y como hicieron en el partido de Liga -apenas sumó cuatro puntos y terminó el choque con un menos dos de valoración- es algo capital.

"Tuvo un pequeño bajón en el mes de enero. Los últimos partidos está siendo, otra vez, uno de los mejores jugadores de la Liga. Es uno de los referentes de su equipo que tenemos que frenar", señaló Javi Beirán, su compañero de selección.

Nico Richotti afirmó que "está teniendo un nivel altísimo. Me gusta ver su evolución porque hace mucho tiempo que nos enfrentamos. Va a ser todo un desafío para mí intentar pararle".