La Mutua de Accidentes de Canarias (MAC) presentó ayer en junta directiva las cuentas del ejercicio económico del año pasado, que reflejan que el beneficio rebasó los siete millones de euros, según informó en un comunicado.

Esta cantidad supone un crecimiento del 50% con respecto a 2009, debido, sobre todo, a las estrategias de reducción del gasto, que han permitido mejorar el resultado a pesar de la bajada de los ingresos, precisó su director gerente, Manuel Rodríguez Rosario.

Los datos generales del ejercicio 2010 ascendieron a 71.500.000 euros en concepto de ingresos, mientras que los gastos fueron de 64.170.000, logrando un balance positivo de 7.330.000 euros.

Rodríguez Rosario recalcó que el "importante" ahorro ha sido "un mérito de gestión debido a un conjunto de factores y a la férrea política de contención del gasto que venimos aplicando en la Mutua para hacer frente a un contexto de crisis económica como el que padece hoy el conjunto de la sociedad".

Centros asistenciales

La junta directiva de la MAC, cuya presidencia ocupa José Fernando Rodríguez de Azero y que cuenta con Sebastián Grisaleña como vicepresidente, informó, además, de la apertura de dos centros asistenciales en La Palma y en La Gomera y de la puesta en marcha de un plan de mejoras específico para la Clínica MAC de Las Palmas de Gran Canaria, el mayor centro asistencial con el que cuenta la Mutua de Accidentes de Canarias en las Islas, y del próximo traslado y mejora de sus instalaciones en Lanzarote y Fuerteventura.

Esta entidad, que desde hace tres años forma parte de Corporación Mutua, el mayor grupo de mutuas del país, cuenta con más de 100.000 trabajadores asociados.