Aena ha puesto en marcha el ''Plan de Actuaciones Invernales frente a contingencias de hielo y nieve'', más conocido como Plan Invierno, en los 19 aeropuertos de la red que durante los próximos meses tienen riesgo de sufrir condiciones climatológicas adversas, dotado para esta campaña con un presupuesto de 2,3 millones de euros como el año anterior.

En este plan operacional participa tanto personal de Aena como de otros agentes implicados, entre los que están las compañías aéreas y los agentes de ''handling'' de asistencia en tierra, informó Aena en un comunicado.

Los aeropuertos incluidos son Albacete, Barcelona-El Prat, Bilbao, Burgos, Girona-Costa Brava, Federico García Lorca Granada-Jaén, Huesca-Pirineos, León, Logroño-Agoncillo, Adolfo Suárez Madrid-Barajas, Madrid-Cuatro Vientos, Palma de Mallorca, Pamplona, Salamanca, San Sebastián, Santiago, Valladolid, Vitoria y Zaragoza.

En el resto de las instalaciones de la red de aeropuertos españoles de Aena, formada por 46 aeropuertos y dos helipuertos, se mantienen el nivel de respuesta ante este tipo de inclemencias meteorológicas que varía en función de sus necesidades y ubicación. En el último año han recibido formación específica 88 trabajadores para estas tareas.

Para esta campaña, Aena dispone de más de 100 vehículos propios destinados a la retirada de nieve y hielo, así como de otros vehículos implementados con cuchillas y esparcidores de urea. Además, dispone de una capacidad de almacenamiento de fundentes propios de más de 450 toneladas.

Entre ellos destacan, por ejemplo, 22 vehículos medidores de coeficiente de rozamiento, 23 camiones con cuchilla quitanieves con esparcidor de fundente, 4 camiones esparcidores de fundente líquido y 17 barredoras (con cuchilla quitanieves o sopladoras), así como camiones contra incendios, tractores y vehículos 4x4 equipados con cuchillas quitanieves.

EQUIPOS EN BARAJAS.

A estos medios se suman los del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas que cuenta con 9 camiones equipados con cuchilla y cepillo barredor y soplador, 3 esparcidores de fundente líquido y 9 camiones equipados con cuchilla y cepillo barredor y soplador.

También cuenta con 3 esparcidores de fundente líquido, 2 fresadoras, 6 palas cargadores, 14 mini-excavadoras, 5 camiones con caja, 2 vehículos todo terreno con cuchilla y 2 vehículos destinados a inspección y control.

FORMACIÓN DE PERSONAL.

Dicho plan establece los procedimientos que deben seguir los aeropuertos para este tipo de contingencias con el objetivo de que el hielo y la nieve no afecten a las operaciones programadas o se minimice la influencia que las mismas puedan tener en el tráfico aéreo.

Desde 2003, se viene impartiendo formación vinculada a este plan invernal a todos los colectivos implicados con un total de 6.300 personas preparadas desde entonces hasta hoy, sumando más de 92.700 horas de formación.

Concretamente, en las campañas de 2016 y 2017 recibieron formación un total de 1.728 trabajadores con cerca de 5.500 horas de preparación y en el último año han recibido formación específica 888 trabajadores.

Las acciones formativas van destinadas principalmente al persona de Servicios de Extinción de Incendios de los aeropuertos, así como al personal que participa en las actividades relativas a los equipos medidores del coeficiente de rozamiento en pistas.

PROTOCOLO DE ACTUACIÓN.

Los procedimientos que contempla se actualizan regularmente, la maquinaria y medios técnicos se revisan periódicamente y el personal implicado reciben información continuada.

En el caso de presencia de hielo o nieve, el fundente se emplea como descongelante para eliminarlo y se procede después a limpiar con medios mecánicos (cuchillas quitanieves o barredoras) los restos que queden en las zonas afectadas.

Si las pistas y plataforma están cubiertas de nieve se limpian con vehículos con cuchillas quitanieves y esparcidores de fundente sólido o bien fundente líquido. También se usan barredoras de pista y ocasionalmente camiones del servicio de extinción de incendios fuera de línea o en reserva en los que se instala una cuchilla quitanieves.

Los vehículos medidores de fricción comprueban el coeficiente de rozamiento de las pistas para verificar que es el adecuado y si es positivo se comunica a los implicados.

En las aceras y zonas de paso de los usuarios, si es necesario, se aplica urea o bien otro tipo de fundente similar.

Puede ocurrir que las aeronaves necesiten acudir al servicio de deshielo o bien que las propias aerolíneas lo contraten con un agente de asistencia en tierra.