El que fuera vicepresidente económico de los gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero entre 2004 y 2009, Pedro Solbes, ha manifestado este miércoles en el Congreso que le hubiera gustado dejar el nivel de deuda en los márgenes del 10% del PIB, pero que las resistencias del resto de miembros del Gobierno no lo permitieron.

"Me gustaría haber tenido mejores resultados en términos fiscales y que la deuda hubiera bajado a un 10-12% del PIB", ha dicho Solbes ante la comisión que investiga la crisis financiera, el rescate bancario y la quiebra de las cajas de ahorro.

Durante su etapa en el Gobierno, los niveles de deuda alcanzaron un mínimo del 36%. "Para mí era poco (esa reducción). Para gran parte de esa coalición de Gobierno, mucho. ¿Para qué necesitábamos tan poca deuda cuando se podía utilizar en mil cosas, no todas útiles?", se ha preguntado de forma irónica.

En todo caso, Solbes también ha responsabilizado a la actitud política de entonces sobre el equilibrio presupuestario para no profundizar en el ahorro. "Políticamente, no creo que el país estuviera preparado para venir a esta casa (el Congreso) con un Presupuesto ''superavitario'', aunque fuera lo que técnicamente había que hacer", ha justificado.

"ANTES O DESPUÉS TENDRÍAMOS DIFICULTADES"

Durante su intervención, Solbes ha incidido en que durante su mandato trató de garantizar un equilibrio presupuestario, e incluso ha achacado la falta de valentía para ahorrar más, con el fin de prepararse ante posibles dificultades.

"Tenía muy claro que antes o después tendríamos una situación de dificultad y que cuanto mejor estuviéramos preparados en términos de deuda pública, mucho mejor", ha dicho.

En este sentido, ha lamentado que existiera una "demanda social no justificada" que acabó con la construcción de infraestructuras que provocó un gasto menos eficiente del deseable. "Hemos desperdiciado recursos que podían haber sido útiles en otras cosas", ha aseverado.

En este sentido, ha citado trenes, puertos, aeropuertos o polideportivos que, ha asegurado, habría que plantear "si es la forma más eficiente de utilizar el gasto". En este punto, ha cuestionado, sin mencionar, el gasto de otras administraciones: "En algunos hay que descentralizar el gasto, en otros no".

"Entiendo que todo el mundo quiere AVE en la puerta de casa, pero es la antítesis del Cercanías. No puede ser todo al mismo tiempo", ha dicho Solbes, que sí ha puesto varios ejemplos concretos de medidas a las que se opuso, como el ''Plan E'', la devolución de 400 euros en el IRPF o el ''cheque bebé''.

CRÍTICAS AL ''CHEQUE BEBÉ'', EL PLAN E Y LA REBAJA FISCAL

"No debía haberse hecho", ha dicho, en referencia a esta última medida. "Cuanto menos se tocara la Seguridad Social, mejor, porque tendría sus propios problemas como los está teniendo y los tendrá en el futuro", ha aseverado Solbes, partidario de que, en todo caso, fuera financiado vía Presupuestos "para evitar que se quedara sin dinero" la Seguridad Social.

También ha criticado la devolución de 400 euros en las declaraciones del IRPF, una medida que tuvo que aceptar por ser "una promesa de la campaña electoral". Tanto el ''cheque bebé'' como la rebaja fiscal eran, a su juicio, "propuestas que no estaban bien diseñadas ni definidas".

Otra crítica realizada por el exvicepresidente ha sido la de emplear fondos para el ''Plan E'': "Hubiese preferido reservar esos recursos por si la crisis se complicaba", ha dicho. En todo caso, Solbes ha asumido la responsabilidad de todas las medidas impulsadas, por mucho que le gustaran "menos", ya que considera que tiene "la responsabilidad de aceptarlas".